jueves, junio 07, 2007

Petete y los marcianos


Petete, Petete. Pingüino sabihondo creado por el cineasta español radicado en Argentina García Ferré, autor que ha sido considerado el Walt Disney gaucho. Petete hace su aparición en el mundo infantil en 1975 con la película Trapito y Petete, y regresa en 1980 con la serie televisiva El Libro Gordo de Petete, en la que se muestra a un Petete simpático, entusiasta y deseoso de transmitir conocimiento a los niños. Posteriormente, se publicó una enciclopedia didáctica infantil del mismo nombre. Este es petete, ¿qué les parece?

Los Juegos Interfacultades son siempre una muestra de la idiosincrasia pucp, de sus diferencias, de sus tangencialidades y convergencias, de la dinámica interna de la interacción intergrupal de sus muy diversos mundos culturales. Es así que cada una de las facultades -incluyendo EEGGLL y EEGGCC- tienen su barra, su color -que es también el uniforme- y su mascota. Estos componentes, entremezclados, connotan la identidad y la representatividad de cada una de las diferentes facultades, así como de sus estudiantes (p.e. el color rojo de Sociales; los disfraces del Virreynato de Humanidades). Así, también, cada barra tiene un repertorio de cánticos alusivos a sí mismos y a sus rivales de turno. Por supuesto, los cánticos con contenidos anti- son infinitamente más chistosos, y los hay de diferentes formas, tonalidades y complejidades. Por ejemplo, están las barrabasadas coprolálicas y cargadas de contenido sexual, características de las barras de Estudios Generales Ciencias e Ingeniería, las mismas que suelen ser las más numerosas y ruidosas, las de mayor cantidad de hombres y menor cantidad de mujeres, respectivamente; y las más ofensivas. En contraposición, las demás facultades tienen su respuesta, no menos divertida aunque contundente, siempre marcada de un contenido despectivo en términos societales. Aparecen, así, alusiones a la marcianidad, entendida como la condición del típico estudiante sumergido en libros de ciencia, con su calculadora en mano, lentes gruesos, tirantes, cartas magic en el bolsillo, mil granos en la cara y una actitud ansiogénica frente a seres del sexo opuesto, y por tanto cohibición y falta de experticia en el tema relacional. Otro de los más conocidos grupos de cánticos anti- es el que se le aplica a Derecho, señalando la propensidad al tinterillismo, la venta del alma por el billete, la primacía de la corrupción por sobre la ética, etc. Depende, por su puesto, de la iniciativa y de la calidad de las arengas de cada barra para obtener puntos y así ser considerada la mejor. Obviamente, se califican negativamente aquellas arengas con contenidos denigrantes y/o ofensivos a los rivales.
Con el objeto de inmiscuirme un poco más en la experiencia cuasiorgíastica colectiva de las barras, decidí empaparme en sudor dentro del disfraz más complicado que jamás me puse: Petete, el impopular y casi totalmente desconocido Pingüino bebé del saber, mascota de Humanidades, la Facultad de Letras y Ciencias Humanas. La versión Petetiana 2007 incluyó una risible sesión de perreo chacalonero con la participación de la mascota de Estudios Generales Letras. Así, se formó una alianza barral entre Letras y Humanidades frente a los populares y siempre numerosos marcianitos. Aunque cabe destacar que la participación de las chicas de la barra y sus tan peculiares y poco ortodoxos cánticos se llevaron las miradas y risas de la noche. Dirigidas por un par de psicolocas con un inconfundible vozarrón y una inobjetable histrionicidad, las chicas H gesticularon ridículos cánticos que hicieron reír incluso a los propios jugadores de LLYCCHH, como por ejemplo Araña, araña, araña, ciencias no se baña. Sin embargo, también utilizaron, gracias al apoyo de un grupúsculo de aliados de EEGGLL, unas plantillas barrales contundentes frente a las continuas provocaciones de los cientifistas cuatrojos de al frente, como
Ayayay, qué risa que me dan...
Ayayay, qué risa que me dan....
Ayayaaay, qué risa que me daaannn...
ya tiene veinte años y no pueden debutar.
En líneas generales, las tendencias se mantuvieron y se mantienen, como siempre. Mientras Ciencias e Ingeniería son las facultades con mayores niveles de participación tanto en barras como en jugadores -puesto que de por sí son grupos más numerosos y homogéneos-, y por tanto en resultados finales y acumulados; Humanidades es el grupo que más se resiste a participar de cualquier actividad extracurricular, pues sus miembros en general tienden a ser más academicistas y serios; por tanto, generalmente obtienen los últimos lugares de la competición por pérdidas de tipo walk over, falta de gente para completar equipos, o cero preparación (p.e. meten a cualquier persona para completar el equipo). La especialidad de Psicología, que tiene su propio edificio y que prácticamente funciona como departamento autónomo, y sin embargo pertenece a la Facultad de LLYCCHH, concentró toda la vida y esta vez también el 95% tanto de la barra como de la presencia y participación en los juegos. Así, generalmente nos es difícil armas los equipos, o en todo caso nuestras piezas de recambio son insuficientes o poco variadas; no hay muchas opciones, concretamente, y sin embargo no obtenemos tan malos resultados como nuestro primitivo nivel de organización lo merecería.
Con todo, este año Humanidades, a pesar de contar con Petete -o quizá por tenerlo, quién sabe-, perdió la seminifinal de vóley frente a Ingeniería, lo cual la imposibilitará de pelear por retener su corona tan bien lograda el año anterior. Parece que Petete no contribuyó sino con un granillo de mala suerte y mucho sudor. No saben lo muerto de calor que me sentí ahí dentro, era un horno. Por supuesto que estaba sin ropa, salvo un bóxer que terminó chorreando líquido sudoríparo. Por supuesto, tuve que tomar cada cierto rato agua para no deshidratarme y seguir animando a la barra y haciendo el show, como toda mascota pucp: un poco de señales obcenas aprendidas vicariamente por los programas de lucha libre de atv, otro poco de perreo, otro de expresión corporal en diferentes situaciones que ya dependen del disfrazado. Lo chistoso fue que el cierre maldito del disfraz se me paraba abriendo, y diz que algunas personas observaron o registraron el color de mis boxers, mientras que otras rehusaban ayudarme a cubrir mis vergüenzas por no mojarse de sudor. Lo reincidente, que perdí mi correa con tanto trajín de sacarme la ropa y ponerme el disfraz.... Ayayay, en fin, queda como una experiencia más. Nunca supe que sería Petete. Pero al menos me fue mejor que en el año pasado, en el que me esguincé el pulgar de la mano derecha.
Fuentes.

miércoles, junio 06, 2007

Las cosas que me pasan 2

¿Y qué me dirían si les digo que no les llegué a decir que extravié mi webada esa que llevan casi vacía los misios y pierden los piñas que nunca tienen viernes comunes por la noche? Imagínense que estaba sobrio cuando me sucedieron toda esa bola de eventos infortunados ya mencionados, y que olvidé mencionar algo que en suma es tanto o más importante que el librito de Fromm que no llegué a perder, y que sí perdí ahora, o mejor dicho ese día, pero ahora me vengo a dar con la sorpresa. Sí, qué webón. Imagínense que estaba sobrio. Hablando de eso, a mí nunca me pasan esas estupideces que les pasa a los borrachos, eso de que me pongo necio, que tú eres mi pata del alma y yo te quiero mi yunta mi hermano mi brother. Hablando de eso, a mí nunca me hacen el recuento de lo que pasó el fin de semana que no te acuerdas, webón, te agarraste a tal webona, y luego estuviste witreando en el jardín. Ni siquiera se me pierden webadas como el celular, las llaves o la propia billetera. No, a mí nunca me pasa nada de eso borracho, es más, a mí me pasan estupideces, exclusivamente, de puro sobrio, como si el cuerpo me pidiera que me emborrache un poco, siquiera, qué te cuesta, vao al frente, vao al hueco verde, al elos, al chelín.
Y de puro piña, es verdad. Perder una billetera, y con ello perder tus documentos, y con ello la flojera y la necesidad forzada de ir a sacarlos, maldita sea, que implica tomarte más combis o micros o carros chistosos y a la vez terrórificos de chóferes transgresores y cobradores violentófilos y ambientes recargados de odores repulsivos y lunas abigarradas de colorinches huachafos y paredes de metal y plástico con stickers de condorito, pirañitas sacando el dedo y orinando, y el demonio de tazmania carajeando a esos pasajeros webones que no me peguen chicles ni me escriban en el asiento, carajo, que no me ensucien el carro puta madre, o que usen el cinturón de siguridá, pe, cuide su vida, míster. Y escuchar el asesinato del castellano o el inkarrí mítico del quechua no superado con frases como esquina bajan, cuando solo baja uno, o de cercenaciones y/o alienaciones sociolécticas como sssajes o asencíllame, varón, respectivamente; o bien las defunciones del lenguaje y la humanización con el sonar de las monedas, de las puertas y los cláxones, y de los gritos repetitivos, compulsivos y viscerales que además son expansivos y auralmente contaminantes.
Ahora tengo que sacar mis duplicados de los carnets de biblioteca, del de 1/5 menos de pasaje -porque medio no es eso ni cagando, no me vengan- y del de mi DNI o documento de identidad lorcho. Tengo que ir después de mi liiiiiiindaaa clase de las 8am con este frío samputezco, llevando no sé qué tanta vaina que por ahí tengo apuntada en una hoja suelta de esas mini agendas que regalan en las clínicas y que siempre están en las mesitas de teléfono de las casas de niños bien que mañana más tarde estudian carreras que la mayoría desconoce o preconcibe como improductivas en términos de yuppismo de pequeño burgués o de montañistas de escalas sociales. Tendré que soplarme primero el burocratismo del caviarismo usurero y pucpiano de pagar un huevo por los duplicados de los carnets universitarios. Y después, por si fuera poco, la hazaña de viajar al ultramar de la Bolívar y la Brasil a tiempo y sin perderme para lo del DNI. Por suerte voy a cambiar la foto del mismo, que es la peor foto carnet que me han sacado alguna vez en mi vida, en la que aparezco con pinta de panadero vespertino y que por suerte nadie verá más, ya que aprovecharé para cambiarla por otra nueva; eso sí, sin ir a esos centros de fotografía misteriosa y sospechosamente ubicados al costado de Registros Públicos que te sacan fotos sin avisar y hasta las patasmente. Aprovecharé también de reducir el tamaño del DNI, para que cuando me vuelva a comprar una billetera no tenga dificultades en caletear la vista de una foto carnet mal tomada que sale peor que yo en mis sobriedades de etílica estupidez.
Ahora, debo reconocerlo, ya no me da tanta risa lo que me pasó.

lunes, junio 04, 2007

El soroche de Blatter



soroche.


(Voz quechua).


1. m. Am. Mer. Mal de montaña.


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Qué te traes, pelado. Joseph Blatter, presidente de la FIFA.




La FIFA o Fédération Internationale de Football Association, por intermedio de su presidente Joseph Blatter, ha determinado que el deporte del balompié no sea jugado profesionalmente a nivel internacional a más de 2500 metros sobre el nivel del mar. ¿Cuál es la razón de fondo para esta arbitrariedad? ¿Por qué se castiga a países como Perú, Ecuador y Bolivia, y por el contrario, no se afecta a México, quien seguiría aprovechando la altura que sus estadios le brindan? ¿Qué tiene de especial la medida de 2500 metros para utilizarla como tope? ¿Han habido estudios geológicos y climatológicos al respecto? Todo se entrevé turbio y nebuloso. ¿No será que México habría negociado por intermedio de los muchos millones que su alienada liga posee este tope? Revisemos un poco la misión de la FIFA desde su propia página web, y comprobemos así sus incongruencias.





"The world is a place rich in natural beauty and cultural diversity, but also one where many are still deprived of their basic rights. FIFA now has an even greater responsibility to reach out and touch the world, using football as a symbol of hope and integration."





Si se supone que la FIFA tiene como responsabilidad el llegar a unificar al mundo utilizando el fútbol como símbolo de esperanza e integración, como dice la misión, entonces ¿cómo es posible que se excluyan a aquellos países de altura? No tiene ningún sentido desde la lógica propia de la FIFA. Recordemos que este texto está firmado por Joseph Blatter. No creemos que Mario Poggi lo haya asesorado en la redacción de su discurso, así que Blatter debiera ser consciente de lo que está estipulado en él. Pero, naturalmente, hay más.
Veamos ahora sus objetivos -nuevamente, señalados por la misma FIFA a través de la firma de su presidente que parece asesorado por Poggi-:




"Develop the game. Improve the game of football constantly and promote it globally in the light of its unifying, educational, cultural and humanitarian values, particularly through youth and development programmes. Football development means investing in people and society at large. Football is a school of life.



Touch the world. Take world-class football action and passion at all levels to every corner of the planet through our 208 member associations. The broad range of competitions shows the many faces of football, spearheaded by the FIFA World Cup™.



Build a better future. Football is no longer considered merely a global sport, but also as unifying force whose virtues can make an important contribution to society. We use the power of football as a tool for social and human development, by strengthening the work of dozens of initiatives around the globe to support local communities in the areas of peacebuilding, health, social integration, education and more."





Como vemos, el texto está plagado de palabras que aluden a la integración y unificación universales. Algo que por supuesto se contradice hondamente con separar a un grupo que no solo incluye a Bolivia, Ecuador y Perú, sino a varios más de las 208 federaciones afiliadas. No por gusto la FIFA tiene más filiales que la ONU, señor Blatter. Si la FIFA tiene el objetivo de invertir en el desarrollo del mundo como un todo, y utilizar al fútbol como una fuerza unificadora cuyas virtudes y poder son usados por ella como una herramienta para el desarrollo social y humano, y para apoyar comunidades locales en lo que respecta a la integración social, entonces no tiene sentido este recorte, esta exclusión hacia los países que geográficamente son altos, países que en su gran mayoría son de poblaciones y comunidades en vías de desarrollo o subdesarrolladas y que necesitan todo el apoyo que organizaciones como la FIFA están comprometidas a dar.


Por último, repasemos los valores de este contrariado organismo:




"Our core values of authenticity, unity, performance and integrity are at the very heart of who we are.



Authenticity. We believe that football must remain a simple, beautiful game played by, enjoyed by and touching the lives of all people far and wide.
Unity. We believe it is FIFA´s responsibility to
foster unity within the football world and to use football to promote solidarity, regardless of gender, ethnic background, faith or culture.
Performance
. We believe that FIFA must strive to deliver football of the highest quality and as the best possible experience, be it as a player, as a spectacle, or as a major cultural and social enabler throughout the world.
Integrity. We believe that, just as the game itself, FIFA must be a model of fair play, tolerance, sportsmanship and transparency."






Por supuesto, si hemos encontrado serios reveses en lo que ya parece un planfeto sofista de candidato político, también los hemos encontrado en los valores que supuestamente representan el corazón de lo que hacen a la FIFA lo que es. ¿Cómo ser auténtica y cómo llegar a ser disfrutado el fútbol por todas las personas si se margina a un grupo de países cuyas particularidades geomorfológicas determinan que haya altura? ¿Cómo buscar la unidad y promover a través del fútbol la solidaridad, sin importar el género, grupo étnico, fe o cultura, si se discrimina abiertamente a un grupo de seres humanos que viven en las montañas altas? ¿Cómo hablar de transparencia cuando una institución toma medidas de esta naturaleza, tan poco coherentes, arbitrarias y verticales, que menoscaban los derechos de las minorías y no afecta o afecta poco a aquellos que tienen el poder económico para hacer peso por su cuenta?




Desde aquí felicitamos al presidente boliviano Evo Morales con el que, pese a las discrepancias ideológicas, políticas y pragmáticas que puedan haber, alentamos a seguir en su postura de no asistir a la Copa Cháverica 2007 de no solucionar, el miedoso al soroche Blatter, el impasse respectivo. Es más, creemos que Perú debería apoyar esta iniciativa del aguerrido y valiente Evo -ya desarrollaremos esta idea en un siguiente post-.



Notas.
1. Para ver la misión de la FIFA, sigan el siguiente link:
http://www.fifa.com/aboutfifa/federation/mission.html
2. Foto tomada de:
http://www.adgoog.com/blog/photo/1724a-sepp_blatter_voudrait_rejouer_la_finale.jpg

domingo, junio 03, 2007

Algunos porqués de mi escepticismo (2): El escándalo de la Bolocco

Como si se tratara de una noticia fundamental, importantísima y de público conocimiento, se publicaron y difundieron, desde hace un par de semanas, escabrosas fotografías íntimas de Cecilia Bolocco, la esposa de Carlos Menem, ex presidente octagenario e indefinidamente candidato a la presidencia de la Argentina. Las fotos fueron tomadas en su casa de playa de Miami por un paparrazo que estuvo cerca de tres días aguaitando cual buitre el momento oportuno para entrar en acción.
El tema a tratar aquí no va a ser el absurdo machismo que lleva a un viejo a casarse con una ex miss universo para sumar más votos en su campaña, a sabiendas de que esta acción, que para nada tiene que ver con alturadas propuestas programáticas para su plan de acción gubernamental, calará en el estúpido pueblo que ve en ello la adhesión política, el mismo que legitima incluso el despilfarro y la corrupción, porque Menem la hizo con un bomboncito, woooow. Podría desprenderse la actitud conservadora y machista del mundo hispano, que ha comentado esta sacada de vuelta a medias como si se tratara de algo raro, inverosímil o desestabilizador. Si el hombre tiene el soterrado derecho de sacarle la vuelta a la mujer, ¿por qué ella no lo tendría también? De otro modo habría una hipocresía legitimada y una segregación jerárquica absurda. Y me referí a sacada de vuelta a medias, porque para nadie es una sorpresa advertir que este matrimonio era un acto más mediático, publicitario y farandulero que una manifestación espontánea de romanticismo. Entonces, ¿dónde está el morbo? ¿Dónde está el ohhh, le sacó la vuelta? Exploraremos un poco el tema en relación a la función del mal llamado periodismo paparazzo, que no es otra cosa que el uso indebido de la libertad de expresión para irrumpir en los derechos de otros, simple y llanamente, por satisfacer la máxima del sistema consumista contemporáneo del neocarpediem, el pan y el circo.
El escándalo de la Bolocco*.
Ahora resulta que uno no puede vivir su vida tranquilamente al interior de su domicilio. Ahora resulta que uno no puede vivir plenamente, ni siquiera dentro de su casa. Que uno no pueda gozar de su derechos más elementales como el de su propia privacidad. Todo por ese morbo involutivo, lóbrego y repugnante que se desarrolla a través de la desinformación, del embrutecimiento colectivo, del neocarpediemismo del pan y circo que proporcionan las tecnologías de comunicación, que tanto daño le hacen al desarrollo de la inteligencia, el pensamiento crítico y por ende la libertad (porque la libertad no puede entenderse sin el desarrollo del intelecto y el pensamiento crítico, los mismos que son contenidos por la estupidización sistemática y colectiva de los medios, agentes principales del consumismo). Todo por el circo para el pueblo bruto, todo por el ráting, todo por la estupidización mediática que el desarrollo y poder de los medios sin el debido control de entes reguladores que fijen parámetros para los mismos ocasiona.
Que no me vengan con que soy conservador por exigir una regulación para los medios, si su diz que libertad es falsaria y acomodaticia, como la de ciertos canalitos bananeros y macondianos ayayeros de presidentes que más bien deberían ser presidiarios, o también, y por qué no, de magníficas empresas gringas con filiales en distintos idiomas, que tergiversan la información a su antojo y placer, pastando a toda la bola de autómatas del mundo feliz huxleyiano en el que vivimos. Que no me vengan que soy conservador por exigir esta regulación, esas son pachotadas sofistas. Libertad no significa libertinaje, y derecho a la libertad de expresión no significa inmiscuirse en la vida privada de las personas. Libertad de expresión y de opinión debiera ser, claro, pero con un fin, con el fin de informar, formar e instruir a la gente, no pasearla, divertirla y en el fondo desinformarla, deformarla e involucionarla en términos intelectuales. Todo tiene un límite señores, incluso debiera tener un límite la inescrupulosidad que lleva a unos sujetos sin moral como son los paparazzos a acosar a las personas famosas.
Y no me vayan a salir con que estoy de acuerdo con Gisela en su pelea contra Magaly Medina, esa sería una muestra más de la concretud del pensamiento que deviene del asnamiento continuo de la masa por intermedio de los medios. Acuérdense de cómo y por qué murió la Princesa de Gales. Acuérdense de los derechos por lo que están saltando los medios en Venezuela frente a este gorila miserable, autócrata, pillo, diz que bolivariano. Las lágrimas de RCTV serían de cocodrilo si en efecto sus reporteros practiraran este oficio repugnante que es el paparazzismo. Están clarísimos los dos extremos, por un lado el autoritarismo neanderthálico de un cachaco con vara que suprime las libertades de sus connacionales, y por otro la utilización de esa libertad para fines inescrupulosos y mediáticos, tan asnantes como los métodos del mismo Chávez.
Y no voy a rebajarme a la calidad argumental de Gisela Valcárcel, ex bataclana y cuasi michaeljackson peruano, sino que plantearé lo siguiente: como la educación lo es todo, debemos instruir, en la medida de lo posible a nuestra propia gente, contribuir con el ejemplo, con nuestro granito de arena, de la manera en que podamos, a no desarrollar un gusto por lo banal, lo insignificante y lo estúpido del farandulismo, el chisme y el morbo. No se trata de eliminar este tipo de prensa, se trata de enseñar a la propia gente qué es lo verdaderamente importante, si el inmediatismo barato del carpediemismo moderno, el divertirse y pasar el rato y la vida como entes sin capacidad de discernimiento, deliberación y por tanto de ejercer y gozar plenamente del derecho de la libertad, o el desarrollo del pensamiento crítico, la inteligencia y el cultivo de la cultura, el desarrollo personal, la autorrealización y la completud. Ya juzgarán ustedes qué es más importante.
(*) Nota.
Consideré correcto y coherente no mostrar fotografía alguna, puesto que estoy en abierta oposición al paparazzismo farandulero. Total, este no es un blog amarillezco. Pero pueden buscar "boloccazo" en google imágenes y de hecho las encontrarán.

sábado, junio 02, 2007

Plenilunio

(Del lat. plenilunium)
1. m. luna llena.
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http://www.rae.es



Premisa 1. Los cuerpos celestes ejercen gravedad hacia cualquier cuerpo del universo a través de su masa sin importar la distancia que los separe.
Premisa 2. La Luna es un cuerpo celeste que ejerce gravedad.
Premisa 3. El agua es afectada por la gravedad que ejerce la Luna.
Premisa 4. Alrededor del 70% del cuerpo humano es agua.
Conclusión: Cuidado con los impulsos.

viernes, junio 01, 2007

Las cosas que me pasan

Puta madre. Hoy amerita ser absolutamente bizarro, deliberadamente soez y dennysfalvísticamente coprolálico, así que para los que están acostumbrados a leerme siempre todo respetuoso y educadito, se dejan de webadas y desensibilicen sus malacostumbrados ojos -no se hagan, si total son chibolos lisurientos, todavía- a las lecturas política y educadamente correctas que luego rayarán sistemática y autómatamente con esos plumones psicodélicos llamados resaltadores.
Qué cague de risa es mi vida. Y mis aventuras. Mis estupideces, concretamente. Resulta que hoy me regresaba a mi jato como cualquier día normal, saliendo de la PUCP por la puerta principal, todo chévere, conversando con un pata y comiendo -mis ahora preferidas- granolas del cafetín de por la salida, luego me encontré con un par de amigas de la facultad que estaban conversando en el paradero y me acerqué, les invité la granola y me cagaron al decir que sabía -y por lo tanto tenía- a chocolate, entonces me reventaron el globito de una ilusión más. Hasta ahí todo normal, ¿no? Bueno, de ahí me subí al micro para regresarme, como siempre en el Daewoo blanco y gigante que sobresale de todos esos carros chistosos que nos llevan a nuestras casas no menos chistosas cada uno de sus no tan chistosos días. No hubo nada extraño durante el recorrido, leyendo un libro durante el trayecto, como siempre que escojo subirme en el Daewoo, porque es el único micro que me lleva a mi jato y en el que puedo leer tranquilamente sin que me moleste tanto la actitud neanderthálica de sendos cobradores y choferes -además, en el Daewoo generalmente no hay cobradores, cosa altamente positiva para mí-. El problema fue al bajarme. Cuando hube pisado el paradero en Paseo Parodi, advertí, oh estupidez, que había dejado el libro que estaba leyendo en el micro. ¡Pueden creer tal animalidad! Yo tampoco, y tardé minutos valiosos en darme cuenta primero y en asimilarlo después, y además en tomar un taxi para recuperar mi libro. Gracias a Confucio que no había cerrado la mochila todavía y me di cuenta, todavía a tiempo, que el libro se me había caído. Entonces, tomé un taxi que felizmente no creyó que estaba loco cuando le dije que se me había caído un libro en el micro Daewoo, señor, sí ese, ese micro grandazo que va por toda la Javier Prado. El taxista, divertido, dijo que me cobraría según la distancia recorrida hasta que alcanzáramos a ese Moby Dick motorizado. Todavía tenía unas monedas o fichas de hace 6 años del Moy de no se dónde, pero el bulto de la billetera me daba una extraña sensación de seguridad. La cosa es que, por fin, le dimos caza sin arpones ni cierres de camino -ni cagando podría el mísero Tico frente al goliático Daewoo, quedaría más liso que las microscópicas tetas de Fiorella Rodríguez; lo aplastaría con una brutalidad güestáltica a pesar de ser la misma marca y familia-, aprovechando un semáforo generoso, mismo Salvado por la Campana. Entonces, le pagué al taxista, recogí mis cachibaches -que carajo, justo hoy que tenía que correr tenía tantos, que hasta se me cayeron en el asiento y casi pierdo el cambio de luz- y corrí al micro. Inefable fue mi sorpresa al sorprenderme de lo inefable que podía ser que mi librito no se lo habían robado -quizás no tuvieron tiempo-, sino que el chofer lo tenía acomodado frente a sí, apoyado en la enorme luna llena de stickers lorchos y huachafos. Lo tomé, agradecí la deferencia, bajé antes de que cambien la luz y me vi solo en Aviación, con mi mochila a medio cerrar o abrir, con mis cuadernos y textos desparramándose indefinidamente por la abertura de la mochila hacia la ingente orilla negra de la pista, y con una edición del año de la pera de El Arte de Amar de Erich Fromm que encima lo compré usado en el qiosqo de por el paradero de la PUCP por miserables cinco soles, y que además estaba plagado de sellos de la biblioteca de un profesor de filosofía del que nunca había escuchado hablar en mi vida.
Me ubiqué rápidamente, gracias al cielo y a que bueno, pude ver pese a mi miopía inconmensurable que estaba como por la veinte de la Javier Prado Este -o sea que como a dieciséis cuadras de mi casa-, y de pronto advertí que estaba mucho más cerca de la casa de una ex que nunca me devolvió mis fotos de bebito que mi mamá cada cierto tiempo me lloraba que las recupere. Emprendí el camino, más divertido que asustado, puesto que no tenía nada que perder -ya que por esos azares me había quedado sin plata-, salvo el tiempo en actitud divertida, que finalmente no es perder el tiempo, sino consumirlo alegremente. Carpe Diem rules, yeah. Cuando llegué a la puerta de servicio me identifiqué frente al vigilante como el ex de fulanita de tal, no, viejo, no quiero hablar con ella, fácil está tan fea que ya ni la reconozco, solo quiero que me devuelva -por intermedio de su empleada si quiere, no me importa- las fotos de bebito que le presté para que me las escaneara y que nunca tuve la oportunidad de pedírselas. El vigilante, a diferencia del taxista, sí me miró con cara de qué haces acá loco de mierda, te seguiré el juego a medias. Entonces llamó a la casa, la empleada le dijo que no estaba -oh, casualidad-. Entonces le dije que si podía ella misma -la empleada- ir al cuarto de la señorita con comillas a recoger las fotos para dármelas, y el vigilante me respondió que la muchacha decía que ella no entra a la recámara de la damisela fulanita -que en realidad es más fulanita que damisela, y fulana, peor, y sutana y mengana también- sin su permiso. Entonces le dije por intermedio del vigilante que le dijera a la empleada que le dijera a la fulana diz que fulanita diz que damisela que buscara mis fotos y las tuviera a la mano para cuando yo vuelva a pasar por ahí a recogerlas. Entonces, el vigilante, con toda la fatua soberbia o cojuda prepotencia proporcional al tamaño del falo plastificado que le cuelga a todo huachimán imbécil, se comunicó con la seguridad por intermedio de su enorme huaquitoqui, otro elemento inversamente proporcional al maní sin confite que se ahoga de soledad en el océano de su cabeza de cabellos casposos apretados por una gorra con marca de transnacional decadente. Entonces dije que por favor le avisaran a la fulana mengana sutana diz que fulanita diz que damisela que, si es que tuviese en su poder todavía las fotos de bebito que mi mamá llora cuando recuerda que se olvidó hace tanto tiempo de llorarlas, las deje con la empleada que yo volvería indefinidamente, o cuando me suceda alguna cojudez semejante a recogerlas, sin prisa. Entonces me acordé de que hacía frío, carajo, y luego me acordé también de que a una cuadra de la casa de la fulana y etcétera, vivía una amiga de cuya casa podría llamar a mi viejo para que me recoja, dado que la persecución imprevista del Moby Dick mecánico que se había tragado mi libro que me había llevado a parar en Guardia Civil cuando yo me bajo normalmente en Parodi me había dejado sin fichas. Fui entonces a la casa de mi amiga pseudovecina de la pseudo damisela que era mi pseudoex, aunque no me acordaba la dirección exacta, así que interrumpí a un huachi que estaba escuchando y durmiendo al son radio incasat am o fm o pm o un partido de fútbol, que es la misma mierda, así que le pregunté que por dónde es la casa de la familia Vinelli, y el patita me dijo que aquisito nomás, a dos puertas, y que bueno que el aquisito era aquisito y no allazote, porque en efecto llegué a la casa al cabo de tres pasos de cojo senil. Entonces toqué, pensando encontrar a la webona ésta, perdón, Fiorellita, sé que estás leyendo esta estupidez ahora que te dije que leas esta estupidez y tú estúpida me haces caso de leer mis estupideces estúpidamente mal escritas. Pero el que me contestó fue su hermano o eso supuse, quien no me escuchaba porque el perrito de Fiorella se computaba Argos y ladraba y ladraba merced a sus escasos céntimetros de pecho de pollo lampiño que harían que cualquiera dudara en apostar por él frente a una vainaza como Lay Fung o esos híbridos de perros violentos que se han comido a los que jugaban a los gallos de pelea. Finalmente me llegó a decir que la estúpida de Fiorella, cómo la cagas, webona, no había llegado, todavía, cuando fui a tu casa, maldita, como si yo fuera siempre a tu domicilio o mejor dicho como si siempre tuvieras el privilegio de recibirme. Te odio. Por algo estudias derecho y te pintas el pelo. Mentira, te amo tanto como a Laura Bozzo. Bueno, entonces continué mi shoteado camino y se me ocurrió en mi carencia de sencillo y frío crepitante por los dedos de mis manos que percibían que no había una puta moneda en mi puta cómo se llama esta webada, ah sí, billetera. Ven cómo no tenía plata que ni me acordaba el nombre de esa porquería que sirve para guardar las monedas de los que se aguantan el seguir siendo misios. Bueno, llamé a mi papá para que me recogiera de mi naufragio post captura del libro que me se cayó en el Moby Dick metálico y que me llevó a pedir que me devuelvan las fotos de bebito que tanto lloraba mi madre cuando se acordaba de que se había olvidado de llorarlas, las mismas que eran para escanear y que nunca me devolvió mi diz que fulanita y damisela pseudoex con empleada que limpia su cuarto pidiendo permiso y su huachimán con falo plastificado que destilaba una soberbia fatua al hablar. Me recogió, en efecto, en menos de diez minutos, antes de que me volviera loco el recuento de las estupideces que me habían pasado y el frío que se me crepitaba por los dedos de las manos que dejaba escapar mi polera de Boca que compró mi hermanito en Argentina en el viaje que perdí porque tenía los parciales de la PUCP de la que salí para tomar el Moby Dick que se tragó mi libro de Eric Fromm que profesaba El Arte de Amar que nunca aprendió un profesor de filosofía del que nunca supe su nombre hasta encontrar los sellos plagando las páginas más monses del susodicho libro que ahora me pertenece.
Para ésto, había estado llamando a Fiorella desde mi nuevecito celular, que en realidad es un modelo casi tan viejo como los ladrillos de las casonas antiguas y abandonadas de la Avenida Arequipa que ahora sirven como escenario de novelas de bajo presupuesto y miserable guión de pseudoimitación de telellorona mexicana. Estaba llamando a la webona, y carajo, había olvidado que había perdido mi anterior celular Claro que mi madre había cambiado por un nuevo y viejo Telefónica que me paraba tintineando que la línea estaba sobrecargada. Entonces me recogió mi viejo y ya dentro del carro, mientras él estaba echándole gasolina o agua o esas webadas que necesitan los autos en los grifos, entró la llamada y le dije que cómo la cagaba no estando en su jato, que puta madre y carajo mierda no sabes lo que me pasó, me subí al micro y estuve leyendo y se me quedó el libro que estaba leyendo cuando bajé, y tuve que perseguirlo con un taxi como persigue un ratón amarilllo a un elefante blanco con complejo de Free Willy, y cuando lo encontré estaba por Aviación y pude recogerlo, y caminando me acordé que me había olvidado de pasar a recoger las fotos de bebito que mi mamá llora y reclama cuando se acuerda de que se ha olvidado de llorarlas, y que por ello tuve que soplarme la sumisión de la empleada y la fatua soberbia del huachi de falo plastificado de la fulana dizque damisela que alguna vez fue mi pseudo no me acuerdo, y que después terminé a parar en tu casa y me respondió un brother que parecía ser tu hermano, webona, y no me escuchaba porque un doggy gritaba como hijo de perra computándose Argos el guardían de las tinieblas cuando mi gato se lo almuerza con limón y las patas delanteras amarradas. Y tu brother o hermano o primo o cualquier mierda que sea tuyo me dijo que no habías llegado todavía, cómo la cagas. Estaba por tu jato, webona, ahora me estoy regresando con mi viejo, todavía por Guardia Civil. En eso Fiorella me interrumpió y me dijo ¿José Manuel? Oye, disculpa, webón, pero yo no vivo por Guardia Civil. Y entonces puta madre me di cuenta que no te había llamado a ti, tarúpida que ahora lees las últimas líneas de este sinsentido sino a otra amiga Fiorella, que me había dado su celular justo un día después de que tú me diste el tuyo-y ahora se debe estar psicoseando pensando en que mis formas de abordar son extremadamente ridículas y psicopatológicas, o cagando de la risa de las webadas que solo a mí, Chema Delgado, me pueden suceder-; igual es tu culpa webona por no darme tu número como tu tocaya que lo hizo justo cuando recién me lo compraron, no como tú idiota que me lo diste cuando todavía mi vieja no me había reemplazado el Movistar de mierda que se satura los viernes siempre por la noche y no como mi antiguo Claro que te da mas pero a mí me dio menos porque se murió ahogado la vez pasada en Huanchaco.
Carajo. Las cosas que me pasan un viernes común y corriente mientras otros sujetos comunes y corrientes se van a chupar su común y corriente chela en su común y corrientemente visitado bar de los viernes comunes y corrientes por la noche. Ve tú a saber, Fiorella y la otra Fiorella, y tú también, fulanita dizque fulana diz que nosequemierda, luego de que lean ésto sabrán que a) estoy loco, y b) qué mierda hago estudiando psicología y también c) que en verdad estas estupideces tienen su aspecto divertido, sobre todo cuando sorprendentemente te acostumbras a no sorprenderte de la costumbre de las mismas, y las asimilas como algo natural en ti.

lunes, mayo 28, 2007

Algunos porqués de mi escepticismo (1): Cierre de RCTV

Vuelvo al ruedo bloggero después de varios días de sequía, y vuelvo malestimulado por más y más ejemplos de la podredumbre y miseria moral e intelectual de algunos vergonzantes representantes de la especie humana. Aquí algunos, a modo de recuento -acabo de animarme a hacer una saga, o mejor dicho a desanimarme por mi propia salud emocional de enumerar ejemplos en un solo momento-:


Cierre de RCTV (Radio Caracas Televisión de Venezuela).
Todo tiene su final. Con cachita, el lema del ofensivo spot publicitario -con música, por supuesto- de la prensa chupamedia chavista ha pegado con fuerza esta semana. Desde aquí auguramos que se le queme la boca al sátrapa con sus propias palabras, pues todo tiene o tendrá su final, como bien reza el dicho. Otro refrán famoso será asociado a éste un buen día, cuando el pueblo llanero se salve de esta tristemente célebre abominación de ser humano, que es el pez -o el gorila- por la boca muere. (*)


El tiranuelo miserable diz que socialista y bolivariano Hugorila Chaveta, siendo en Lima las 4:05am, debe haber ya cumplido con su vil y dictatorial amenaza al último bastión de la resistencia democrática del llanero país del norte sudamericano. Cada vez es menor la distancia que dista a este cachaco empoderado de Stalin y del propio Castro, porque el autoritarismo es malo sea de donde venga, izquierdoso o derechista. Siempre es, ha sido y será malo y signo de podredumbre, de corrupción y de vileza el lavado de cerebro de las masas a través de nimios beneficios a cambio de restricciones fundamentales que ofrece la política mediática y populista de los dictadorzuelos bananeros macondianos latinoamericanos, justificadas tan solo por la gollumezca y maldita sed inagotable de poder, que es probadamente la droga más peligrosa que puede consumir el ser humano, ese obnubilante opiáceo que conlleva, junto con un ejército de ayayeros amasatestículos oportunistas alibabezcos que reparten el estado a placer cual botín pirata, a los sátrapas latinoamericanos a enquistarse en la mandatura máxima de sus naciones por el espacio que les pegue la regalada gana, atrasando a sus países económica o moralmente, y mentalmente, eso sin duda. Eliminando RCTV, la resistencia venezolana (**) verá minados una vez más sus derechos, los derechos de todo el pueblo venezolano y los de cualquier ser humano per se, que son los de informarse cabal y verazmente, sin mediación ni intervencionismo -sea cual sea la modalidad que se utilice-. Eliminando RCTV, Chávez no hace más que avanzar en su esquizoide ideación macquiavélica de acumulación de poder. Se trata de un triste y monstruoso resquicio de ser humano carcomido por la adicción más lóbrega, sinuosa e irrefrenable. Eliminando RCTV, Chávez no hace más que confirmarme que no existe peor cosa en este mundo que ser un ser humano, como diría Mark Twain citado por Facundo Cabral, ya compungido y copioso por la erudición y la eremítica y solitaria intelectualidad; o que se ha fregao la vida con un nuevo cambalache, como cantaría el sinigual Gardelito, profetizando lo que sería el siglo XX allá por los grisáceos treintas. Eliminada RCTV, nada puedo decir acerca del pobre pueblo venezolano que cree en la revolución -que tiene más de involución que de otra cosa-, víctimas de la estupidización mediática y sistemática al más puro estilo fujimontesinista. Esas pobres gentes qué van a tener consciencia de las verdaderas intenciones del tirano, si el ser humano ha demostrado ser lo suficientemente idiota para comerse tales discursos, no una sino quinientas veces a lo largo de la historia. El ser humano ha solido siempre compensar sus carencias afectivas a través de la rumiación de populismos, porque es tan sencillo enamorarse, convencerse, tan peligrosamente sencillo dejarse lavar el cerebro...


Ya para qué seguir hablando. Ya para qué seguir pensando y buscándole soluciones a lo imposible, a lo inobjetable, a lo inefable. No es necesario. Hemos fallado como especie, como modo de vida. Estamos involucionando, la sabia naturaleza está sabiendo eliminarnos, poco a poco. Existen varios medios que utiliza para ello, una de ellas es nuestra propia codicia sin límites, aquella codicia llamada política, aquella política llamada droga, aquella droga llamada poder, aquel adicto al poder llamado Chávez, contraejemplo o antihéroe, o simplemente, un ejemplar de lo que puede llegar a ser un ser humano.
Notas:
(**). Recomiendo una página -bloggera, obviamente- de la resistencia venezolana, Venezolano Puro: www.venezolanopuro.com

sábado, mayo 12, 2007

Gorda espera

La gordamente famosa María Martha Serra Lima se presentó el día de ayer en el Círculo Militar de Jesús María, en el marco de la previa a la celebración del Día de la Madre 2007. El evento concentró a unos cuantos miles de canos pero no faltos de energía espectadores, así como uno que otro Enrique-el-Antiguo jóvenes, que vibraron ante la grave e inconfudible voz de la famosa cantante argentina. No habría nada más que agregar, a no ser por una serie de amargos y ridículos cambalaches propios de nuestra idiosincrasia desorganizada tan característicamente peruana.
Las perlas de la noche:
(1) María Martha salió al escenario a las 22:10, cuando el boleto indicaba que el show comenzaría a las 20:00.
(2) El telonero tuvo que prolongar su participación -inicialmente pensada para 30 minutos- por esta tardanza. Bajó inteligentemente apenas la gente comenzó a pifiar -no porque tocara mal, sino por la tardanza-.
(3) No hubo toldo, a pesar de la hora y del frío.
(4) No hubo telón, por lo que fue poco decoroso observar la llegada de cada músico por separado, así como la salida del telonero del escenario.
(5) Justamente, cada músico fue entrando al escenario como si se tratara de una fiesta regular.
(6) Algunas personas se quejaron de que la numeración de las entradas estaba errada, por lo que se sentaron en las sillas que encontraron.
(7) No habían acomodadores, ni vigilantes que controlaran los flujos que podían tranquilamente haberse hecho -por ejemplo, un pendejito que se cambiaba a un asiento de adelante-.
(8) Un concierto cuya entrada para la segunda categoría es de más de s/. 250.00 merece un mejor trato, sinceramente.
(9) ¡Qué pasó, boluda! Se te olvidaron o evitaste intencionalmente, seguramente para efectos de promocionar tu último disco, canciones emblemáticas como Soy lo Prohibido, El Viaje, Algo Contigo, Qué Será de Ti, Échame a mí la Culpa, Se Me Olvidó Otra Vez, Cenizas y El Día Que Me Quieras. ¿Pero vos sos loca?
(10) Apenas una hora y media, María Martha, y eso que te diste tu escapadita (al baño) -según los cochinones de por ahí especularon-. Se te disculpa por la esbeltez y por la edad -jojojo-.
Lo positivo:
(1) William Luna, el telonero de la noche -dícese del invitado que se presenta previamente, usualmente de menor importancia que el artista de fondo-, se lució interpretando temas que mezclaban armoniosamente el huayno y la música pop, o más específicamente -puesto que soy un inculto musicalmente hablando-, la zampoña con la guitarra eléctrica y la quena y el charango con la batería y el bajo. Se escucharon varias arengas: "Perú, Perú", y la gente quedó muy complacida con la participación del buen artista connacional. Un jalón de orejas, nomás, por no haber llevado algún disco a autopromocionarse.
(2) Cómo no, el privilegio de tener tan cerca a María Martha, y a su voz tan entrañable, interpretando temas del renombre de Soy Como Toda Mujer y A Mi Manera.
(3) Para todos los que no fueron, se perdieron a la gorda cantando O Sole Mio. Sí, vaya sorpresita agradable.
Con todo, fue un bonito concierto, aunque hubiéramos esperado más, además de la siempre criticable forma de hacer espectáculos en el Perú. Hay que tener en cuenta que nuestro país está cada vez abriéndose más al mundo y que ello, por consiguiente, trae con mayor frecuencia tanto a turistas como artistas de diferentes partes del orbe, por lo que debemos esforzarnos por brindarles la mejor de las atenciones, y así demostrar que estamos a la altura de las circunstancias. Aunque claro, todavía hay millones de cosas qué resolver como por ejemplo el tránsito, pero mejor ni hablemos de eso.

martes, abril 24, 2007

Descanso

Murmuran las aguas diáfanas, lo demás es silencio.
El mundo está en otra parte, olvidado.
No siento nada en derredor, solo brisa, solo mar.
Los ojos cerrados, el alma abierta.

De timbre crepuscular son los suaves graznidos de las gaviotas.
Los cangrejos, acurrucados, reposan en la silente arena.
Mis pies descalzos no pretenden interrumpirlos, solo compartir.

Tan cerca, el horizonte feliz de azul infinidad. Refugio atemporal.
Tan lejos, el caos de la vida misma.

Nubes rosadas, puesta de sol. Fragmentación. Descanso.

lunes, abril 23, 2007

Del monstruo y su hijo: Del 11S al 16A

[Uno de los profesores más antiguos de la plantilla de docentes de Virginia Tech afirmaba ante las cámaras de un reportero connacional que los Estados Unidos se han convertido, desde que un tejano zafado asumió la conducción del gobierno, en una tierra de vaqueros. No podemos estar más de acuerdo con el veterano profesor. Si bien es cierto que no podemos achacarle culpas de todo al insufrible e impopular presidente Bush, sí podemos poner el grito en el cielo y manifestar nuestra abierta oposición a ciertas características del aparato social de ciertos Estados de la Federación que componen el país todavía más rico y poderoso del orbe. La fácil adquisición de armas es una bomba de tiempo que incubre potenciales catástrofes y masacres como la que el mundo llora en estos momentos, y no puede mantenerse alegremente por el hecho de que la cacería es un deporte nacional -ya eso es indicador poco sutil del índice de violencia del pueblo yankee-, ni por predecesoras hecatombes como 11S. Obligados a reflexionar por esta terrible coyuntura, que pone de luto también al Perú -y no solo en las personas de los deudos del estudiante fallecido- , exploremos y ahondemos el tema.]
Virginia Tech es una Politécnica ubicada en el estado del mismo nombre, en la zona yankee -asumo que todos entendemos qué quiere decir ésto en términos coloquiales- del país del tío Sam. El campus de aquesta institución ha estado abierto a estudiantes de diferentes partes del mundo, y el porcentaje de éstos ha tenido cierta importancia en los últimos años, y va lógicamente en aumento. No así, al menos a gran escala, en lo que respecta a la idiosincrasia sureña para con los forasteros estudiantes, los cuales tienen que arrostrar, todavía, cierta hostilidad xenotípica. Recordemos las votaciones anti-migrantes, el nacionalismo acérrimo de derecha conservadora propio de estas regiones del sur del país. Por supuesto, esta postura se ha ido atenuando con los años y con el incremento de la tasa de estudiantes-migrantes de todas partes del mundo, desarrollándose así cada vez más las relaciones interculturales entre los mismos. No obstante, el fantasma de la Guerra de Secesión sigue apareciendo en gran parte de los trece estados otrora confederados. El partido republicano es el que gobierna. El fanatismo religioso, la intolerancia, la cerrazón a la pluralidad y la acentuación de los estereotipos anti- pululan en el Congreso, en diversas instituciones y en la Casa Blanca.
Cho Seung-Hui ciertamente era un sujeto con serias dificultades mentales, sociales e interpersonales. Estudiaba filología anglosajona, y en más de un trabajo sus profesores, por la calidad y sobre todo el contenido de los mismos, le recomendaron asesoría psicológica. Según los estudiantes de la siniestrada universidad, Cho era un chico raro, solitario, de pocos amigos y palabras, cabizbajo y de trato complicado. Algunos mencionaron que recibió hostiles interlocuciones a lo largo de su paso por VT por su condición de migrante surcoreano. No pretendemos con ello justificar su comportamiento, sería estúpido hacerlo, sólo hemos de mencionar aquello. Ni siquiera se trata de un factor determinante, mas no puede no considerarse en el análisis. Cho no era una persona normal, de eso no hay duda. La xenofobia tampoco es normal, como muchas otras actitudes de los diferentes engranajes sociales norteamericanos -la especificación de las uniones étnico-regionales como los grupos hispanos y afroamericanos, por ejemplo; la navidad negra o Kwanza, por otro lado, una reacción a ese sentimiento de exclusión de la minoría-. Son los mismos estadounidenses los que reconocen en los sureños ciertas actitudes y estereotipos: muchos de los turistas que vienen al Perú rajan sobre ellos, algunos lo hacen incluso siendo de esas zonas, mencionando el extremismo, el fanatismo y la estrechez de pensamiento que dicen les son característicos.
La venta de armas y municiones a diestra y siniestra admite debates acalorados y polémicos. ¿Se puede negociar por unos cuantos billetes la seguridad de toda una ciudad? ¿La vida humana acaso tiene precio? ¿Está facultado -en términos psicológicos y sociales- el pueblo norteamericano, caracterizado por la sobreestimulación mediática y tecnológica que mina el juicio crítico y por el contrario desarrolla automatismos, a portar armas, a adquirirlas con la misma facilidad con la que un niño compra una paleta, tomando en cuenta que 11S tiene todavía repercusiones patognomónicas de proporciones pandémicas? Vamos por partes.
Soy un convencido de que la venta de armas debería ser extinta de la faz de la tierra. Aquél es el único extremismo que me permito. Sin embargo, ante la imposibilidad de lograr tal beatle ideal, por lo menos puedo cuestionar estos mecanismos legales extremedamente incautos que ponen en las manos de cualquier persona, sin importar sus características, armas tan destructivas que ponen a toda la población como chivos expiatorios potenciales de masacres como la del pasado Lunes. Creo que la humanidad ha llegado a una época distinta, que no admite la violencia en ninguna de sus formas, sean éstas manifiestas o potenciales. Creo que el ser humano solo necesita su propia capacidad humana para comunicarse eficaz, eficiente y cordialmente, y no digo bocas o manos, puesto que muchos mudos y mancos han demostrado ser tanto o más humanos que aquellos sujetos que hemos tenido más suerte que ellos.
¿Es necesario portar armas? Entiendo que 11S significó un duro golpe psicológico para el pueblo norteamericano, golpe que catapultó la paranoia a niveles exorbitantes, y que quizás el plantear la veta de todo tipo de armas para la población civil sea demasiado contrareaccionismo -entiendo, mas no lo comparto-. Sería demasiado no porque sea descabellado, sino porque la gente no se siente segura sin armas -lamentable, pero cierto:-. Qué atrocidad, qué vergüenza que sea así. Hasta dónde puede llegar la fragilidad, la inseguridad, la impotencia y la debilidad de los hombres. Es alarmante la calidad paupérrima de los ambientes sociales estadounidenses, que conllevan a las personas a armarse hasta los dientes para disipar enfermos efluvios paranoides. Es lamentable e insano que un pueblo tenga que recurrir a estos extremos para convivir. Y es imperdonable que ésto se mantenga así, y no es de unos pocos años, sino desde siempre, en EEUU se mató a Luther King, a Lennon, y seguramente se quiere matar a Susan Sarandon o a Michael Moore. No es gratuito lo que ha sucedido, y no se trata de decir que Cho Seung-Hui tuvo la culpa, ni se puede justificar por esto el racismo ni nada parecido. La violencia está presente en EEUU; en el mundo en general. Luego de la masacre de VT, un estudiante norteamericano asesinó a un compañero de clases y se suicidó, mientras que en Colombia tres colegiales apuñalaron al director de su centro de estudios. En nuestro país también hay violencia, y muchísima: en el tránsito diurno, en los cláxones, en la cultura de Pepe El Vivo, etc.; la violencia en todos estos casos está tan arraigada en nosotros que no somos capaces de advertirla hasta que ocurren consecuencias extremas como las de VT, así que no miremos ésto con ojos foráneos. En tanto seres humanos, comprendamos que ésto también nos afecta.
Lo menos que podemos exigir es un control adecuado y una rigidez mayor en la adquisición de armas por parte de la población gringa -en Perú tampoco hay tantas restricciones para portar armas, que digamos-. Lo ideal sería que exijamos la veta de las armas, por lo menos para civiles, mas estamos todavía a mucho de ello. No debemos desalentarnos, debemos luchar por cambiar esta realidad tan patética como apremiante. No es posible que se juegue con fuego -literalmente- de una manera tan ingenua. Este hecho, por lamentable que sea, debe servir de ejemplo para reflexionar hondamente sobre nuestras leyes, sobre la calidad y naturaleza de nuestras relaciones interpersonales, y con mayor énfasis, sobre la completud de nosotros mismos como personas. No esperemos que el mandatario cowboy decida una burrada más, embebido en vengativas intolerantes y represivas, si sabemos que él es uno de los responsables políticos. Creemos consciencia de la no necesidad de armas para vivir, abramos nuestras puertas, miremos al otro a nuestro mismo nivel, tratemos de luchar contra los estereotipos y los prejuicios, contra la heredad de taras sociales como el racismo, el machismo y la xenofobia. Démonos cuenta que las cosas suceden en un contexto, en un ambiente, y no son eventos desperdigados sin sentido, por más extremos que sean. Cho puede ser cualquiera de nosotros. Las características personales que se le atribuyen solo pueden explicar los motivos de su conducta, mas el contexto social en el que se desenvolvió, ejerció sin duda, suficiente influencia sobre él. Una sociedad en la que una persona puede adquirir hasta doce armas por año, sin contar las municiones, no es sana. Una sociedad en la que la gente cree necesitar armas para vivir tampoco. Ésto denota serias dificultades en términos de relaciones interpersonales; no neguémoslo, trabajemos en ello. Si bien creo que debe cancelarse para siempre la venta de armas a civiles, tampoco se trata sólo de aplicar desde arriba una política mientras nada se hace desde abajo. Qué hacemos si la gente no reflexiona sobre ello: pronto fabricarían sus propias armas. Mucho trabajo nos espera.

jueves, abril 12, 2007

¡Santa semana!

Qué se puede decir de una semana plagada de desavenencias, peripecias y vicisitudes. Si no las ponía por escrito, me hubiera costado mucho más desatarme de la rabia de las mismas. Es que, caramba, fueron tantas... que hasta me cuesta trabajo recordarlas todas, como a ustedes les costará creerlas, caray. Y leerlas, ujúm.
¡Miércoles!
El miércoles marcó el inicio de una semana para el olvido. Tenía trabajo para todo el día, por lo que el estrés me anduvo persiguiendo desde temprano: clase de 8 a 10 de la mañana, hueco hasta las 7 de la noche; práctica de 7 a 9pm; aplicación de una prueba psicológica a un niño voluntario; viaje a Trujillo apenas saliendo; marcha por los quince años del Autogolpe, en fin, una chanfaina.
Luego de la clase de la mañana, a la que llegué un minuto después de la toma de lista -o sea tarde-, enrumbé a Sociales más como curioseando que como activista: de inmediato me convencieron, fácilmente, de ir a marchar por los quince años del Autogolpe de Fujimori. Un muñeco del 'chino', una torta alusiva a los quince años del golpe -05 de abril de 1992-, y muchos 'regalitos' que recordaban las perlitas del dictador -como La Cantuta, Barrios Altos, el Grupo Colina, etc.- y una serie de ingeniosas y amenas arengas al compás de bombos sonorizados por improvisados palitroques: yucas y botellas vacías. La marcha salió bien, pues, a pesar de que fuimos pocos, empalmamos la misma con otra marcha que tenía como objetivo principal, el respeto y aplicación del 6% del PBI al sector educativo, compuesta por cientos de estudiantes de San Marcos, la UNI y Bellas Artes. A su paso por el Ministerio Público, nuestros poderosos aliados asustaron a un grupúsculo de fujimoristas reaccionarios a nuestra manifestación. Un despelote: los protestantes tomaron la otra vía de Abancay y fueron contenidos por la Policía a Caballo.
Caminé hasta Tacna con una chica de Comunica que acababa de conocer y me embarqué hasta mi casa. Almorcé a las 4; tomé las hierbas del doctor Pun -parte de mi dieta, usualmente las tomaba en la noche, pero no me alcanzaba el tiempo- en un santiamén, calentándome el esófago; salí corriendo a tomar un taxi a tomar la prueba psicológica en la casa del voluntario. La madre del niño llegó bastante más tarde de lo establecido -necesitaba entrevistarla de manera complementaria-, por lo que me obligó a tomar primero la prueba al niño, luego esperarla, después entrevistarla y finalmente faltar a mi práctica de las 7pm, y a correr nuevamente a mi casa a bañarme y alistarme para viajar.
Un comienzo nada auspiciante, pero nada comparado a lo que se me venía. Teníamos planeado viajar a Arequipa por las fiestas, pues mi familia nunca había visitado la blanca ciudad, sin embargo no pudimos hacerlo. De hecho, no podíamos, por fuerza mayor, viajar por placer, sino por compromiso, ya que una de mis tías más queridas se encontraba al final de una triste y larguísima agonía. Viajamos, pues, a Trujillo, y tuvimos que hacerlo a la rápida, por tanto encontramos pasajes cualquiercosa, y vaya qué cosas nos pasaron.
A Ormeño dile No.
La estación estaba repleta, muchas caras chaposas y rubios cabellos dejaban entrever muecas de insatisfacción. Al fondo, unas muchachas de dejo trapecino reclamaban, mientras que el personal brillaba por su ausencia, nadie se aprestaba a dar las explicaciones del caso. Pasaron casi tres horas para partir. Era el colmo. Y eso no era todo. Nos quisieron subir a un bus camión, a lo que nos rehusamos con energía. Finalmente, cerca de la una de la mañana tuvimos que ceder y subir a un vehículo que jamás en la vida costaría 50 soles el pasaje: olía a pichi de gato, los asientos no eran reclinables, no había aire acondicionado, DVD, televisor ni terramoza. Por supuesto, tampoco pasaron un miserable pancito, pero eso sí, el conductor estacionó en repetidas ocasiones, mientras que en más de una oportunidad dejó la puerta abierta durante el trayecto. Una desgracia. Ah, miento, sí hubo aire acondicionado, de gran calidad: a mitad de camino, el conductor ingresó a la cabina de pasajeros y abrió la compuerta del techo, dejando escapar un aire helado que terminó de congestionar las ya roncas gargantas de los estafados clientes. Para remate, nos dimos con la sorpresa -aunque para ese momento ya no lo era, francamente- de que el seguro contra accidentes, es decir, el martillo para romper las lunas y escapar en caso de peligro, ¡estaba roto! Por supuesto, a todos se nos heló el pecho en el pesador de buses, así como la carne de gallina en Pasamayo. Por mi parte traté de animar a un par de gringuitas desafortunadas que se estaban llevando la peor imagen del macondiano Perú. Y es que en el hacinamiento, muchas veces, se desarrolla la resiliencia. Entre todos los pasajeros, tratamos de reirnos un poco de nuestra cómica situación, de tomar el viaje, a fin de cuentas, como algo positivo, como una enseñanza para toda la vida: NUNCA TOMES ORMEÑO.
En el mar, la vida es más sabrosa. En el mar, perdí mi celular.
Llevaba ya unos días en Huanchaco, aquella playa de la infancia, tan linda, tan mía, tan de siempre, y sin embargo la felicidad era extraña a los idílicos y reminiscentes caminares descalzos por la arena. Mi tía Ruth, una mujer de carácter y temple, de una franqueza y entereza encomiables, de virtudes miles, se encontraba en las postrimerías de su vida, y no había más nada por hacer. La mejor amiga de ella, la tía Liliana, una simpática sesentona de madrugadores y alocados despertares, se alojó en mi casa e importunó mis perezosos ronquidos a las 6am. del domingo. Estaba dispuesta a salir a correr por la playa, y por supuesto, le fue muy sencillo convencerme. Llevé conmigo el celular, pues temía que Ruth se me adelantara demasiado, y salí a correr con Liliana por La Poza. La marea crecía continuamente, el agua helada humedecía mis vergonzosamente blancos pies. Sentí entonces que el celular podía mojarse, y cambiélo hacia el bolsillo izquierdo. Carajo, tenía hueco, y el celular, tan rápido como se resbaló, fue tragado por una desgraciada ola maléficamente sincronizada a mis cinco minutos de estupidez. Así, fue el adiós a otro misérrimo modelo celular de los que mis padres están acostumbrados a comprarme. Lo que me dio pena, por supuesto, fue la pérdida de las fotos que había tomado con el equipo: alguna que otra sonrisa de una amiga, revolucionarias imágenes de los plantones, y sobre todo las pruebas irrefutables del Ormeñazo. Por lo menos, recuerdo la placa de ese bus del diablo: VG- 3374.
Atrapado sin perilla.
El domingo fue gris, poco caluroso, casi hasta templado. La tarde pidió permiso al cielo para aparecer en el horizonte, el sol no se dejó ver. La noche llegó silenciosa y lacónica. El cerebro de Ruth había ya fallecido, no así su inacabable corazón. Sin embargo, los familiares que pensaron regresar a Lima esa misma noche, tuvieron que posponer sus viajes, ante el fin inminente y cercano. El lunes sucedió. La mañana y la tarde se consumieron en el hermetismo de las manecillas del reloj. A las 6:15pm, el semblante lleno de dolor de mi tía se transformó en una aliviada y póstuma sonrisa. Habría esperado al cura, dicen, no lo sé. Lo cierto es que por fin descansaba luego de un ominoso y grande sufrimiento. Luego de abrazos copiosos y lágrimas desconsoladas, los familiares dispusimos de inmediato los movimientos para la recepción del velorio. Nos quedamos hasta antes de la medianoche, pues esa es la costumbre Gôrbitz.
Al regresar a la casa, Liliana y mi madre se pusieron a conversar en la sala. Las acompañé, buscando animarlas y animarme con ellas. Al final logré animarlas con otra de mis peripecias: me quedé encerrado en el baño, sin haber presionado la perilla ni el seguro, ni nada. Resolví destruir la cerradura que me impedía la salida, y ya casi lo había conseguido -al menos del lado en el que me encontraba-, mas las señoras me contuvieron, diciendo que llamarían a Iván, el solucionaproblemas de la familia, el cual tardó cerca de una hora en llegar. Obviamente, las malditas acompasaron mi patética espera mofándose con sonoras carcajadas.
Parados.
El día martes, a las 3pm, fue la misa de cuerpo presente en la Iglesia de Huanchaco, en la cual no cabía ni un alfiler más -tan querida es mi tía Ruth-. Seguidamente, el entierro se llevó a cabo en el camposanto Parque Eterno. Las exequias duraron hasta antes del érebo, el cual presenciamos ya en Huanchaco, en compañía de la acongojada familia. Un par de horas después, se propagó la noticia: habría un paro regional en Áncash, y todos los viajes por tierra se cancelarían hasta nuevo aviso. Contra. Pero era en serio.
Una herida más al tigre.
Siendo el martes el entierro, el miércoles fue un día de cambios radicales en la casa. Retenido contra mi voluntad en Trujillo, resolví acompañar a mis familiares. Mis primos, prontos a combatir la posible depresión que la vacuidad de la pérdida de Ruth causaría en el ambiente del hogar para con su padre -mi tío-, contaron con mi ayuda para cambiarle la cara al domicilio todo. Así, junto con Iván, moví mesas, cajones, sofás, cómodas y otros muebles. Todo iba muy bien, hasta que, como ya es costumbre, al menos para el odioso burlón de mi primo, me topé el pie con algo y empecé a sangrar. Verónica, la muchacha que llorara desmedidamente en el entierro de mi tía, me ayudó a desinfectar la herida. Cuándo no, conmigo.
Star en Perú.
Conseguí, gracias a la providencia y a que hasta ahora no han habido nunca paros en el aire, un privilegiado pasaje en avión para el jueves a las 7:40am. En LAN los vuelos estaban copados hasta el sábado; la otra empresa, la escogida, me sonaba neutral, pues nunca había viajado con ella. Al llegar al aeropuerto de Huanchaco, nos dimos de cara con un cartelito que indicaba que el vuelo, a pesar de que inicialmente era a las 7:40am, estaba programado para las 8:10am. Mamá y yo nos hicimos de hombros, pues vaya que habíamos sufrido peores cosas en este viaje de locos, mas nuevamente la mala suerte nos haría pensar en rectificarnos. Fuimos a tomar un desayuno en la usurería, perdón, cafetería del aeropuerto, y al regreso al counter nos dice la encargada, con una hipócrita sonrisa, que el vuelo se habría de retrasar hasta las 10:30 por mal clima. Resignados, pasamos a la sala de embarque a matar el tiempo, mamá con el geniograma, yo con mis lecturas pendientes.
Por lo menos, el vuelo fue bastante tranquilo y llegamos a las 11:35 a pisar el cochino suelo del aeropuerto limeño. Seguidamente, sudamos frío en la sala de recojo de equipajes, pues la maleta que nos faltaba fue la última en aparecer. Muy mortificado, me dirigí a exigir una constancia de retraso de vuelo, a fin de utilizarla como justificación en la universidad, la cual demoró cerca de una hora más. Una hora por un miserable papel, carajo. A tanta incompetencia pueden llegar los peruanos. Star en Perú, vaya experiencia.
Ya me desahogué. Ahora dormiré, no sé si tranquilo, pues todavía ando psicoseado por tanta mala racha, pero por lo menos en casa. Chema está de vuelta, sacándose la sal.

domingo, abril 01, 2007

Domingo de Reclamos

La Resistance. Algunos alumnos de la PUCP visitamos el frontis de la Catedral de Lima este Domingo de Ramos por la mañana. (1)




"Elcomercioperu Lima. Protestan contra cardenal Cipriani en la Puerta de la Catedral. Alumnos de la PUCP lanzaron arengas contra el purpurado.

La tradicional misa por Domingo de Ramos, que celebró esta mañana el cardenal Juan Luis Cipriani en la Catedral de Lima, se vio empañada por el plantón realizado por una docena de estudiantes de la Universidad Católica. Ellos, según indicaron, protestaban por la pretensión del purpurado de querer entrometerse en el manejo del centro de estudios.
Los manifestantes, que se mantuvieron en atrio de la Catedral por 20 minutos, portaban pancartas con frases como: "no a la interferencia"; "no a la intolerancia"; "Cipriani bendice dictaduras", además, de llevar parches en la boca en señal de censura.
Los policías, que resguardaban la Plaza de Armas, persuadieron a los jóvenes para que abandonen el frontis de la Iglesia. Ellos se retiraron del lugar y fueron acompañados por los efectivos hasta el Jirón de la Unión." (2)



Algunas precisiones para los siempre seudoprofesionales periodistas:

1. No se trató de una protesta ni un plantón, fue un acto simbólico.
2. Las arengas no fueron lanzadas, pues no se articuló palabra alguna, ya que el acto fue pensado y realizado en el más sepulcral de los silencios, por respeto a los asistentes a la misa.
3. No brindamos ninguna declaración, por lo que no indicamos nada.
4. Habría que revisar mejor nuestras pancartas, señores de El Comercio.


El termómetro arrojó varias miradas aprobatorias y frases como "está bien, chicos", "están en su derecho", "policías: están atentando contra la libertad de expresión", etc., a pesar de tratarse de gente que estaba saliendo de la mismísima Catedral de Lima. ¿Qué quiere decir esto? ¿Acaso que la gente que asiste a la misa es marxista-leninista, señor Cipriani? ¿Por eso mandó cerrar la puerta principal, porque la gente lejos de agredirnos nos manifestaba su aliento? La ley exige permiso para reuniones masivas -más de 30 personas- en el espacio público, y también prohibe que los policías toquen a la gente, lo que comprueba que no infringimos la misma en ningún momento, por lo que pudimos habernos quedado un rato más, incluso, mas decidimos irnos temprano, pues ya habíamos cumplido en parte nuestra misión, que era simplemente, hacer presencia pasiva y silenciosa en un acto simbólico de repudio al Opus Dei y a esa necesidad mórbida de silenciarnos. Por supuesto, parte de esa misión era joder a monseñor Cipriani, cómo no. Él sabe que ninguna joda se comparará jamás a la intromisión que pretende llevar a cabo sobre la PUCP. Hemos decidido pelear hasta el final, y así lo haremos.

sábado, marzo 31, 2007

OpusDEICISMO* PUCP, El Rey de la Mentira y la Chata Descriteriada

El lunes conversé con un amigo de Sociales y lo insté a marchar para mostrar nuestro repudio a las declaraciones de Rafael Rey como vocero del opusdeísmo-conservadurismo movimiento Cipriani. El martes nos reunimos en el Centro Federado de Sociales unos cuatro gatos. El miércoles estuvimos haciendo pancartas y volantes, no éramos ni veinte. El jueves marchamos internamente por la universidad, alrededor de 30 personas, arengando repudios contra el conservadurismo represivo que pretende implantarse en nuestra casa de estudios. Fuimos a Artes, a la Cafetería Central, a Estudios Generales Ciencias y Letras, a Comunicaciones, Derecho y Humanidades, hasta a la mítica 'Bembos', la desconocida Cafetería de Ingeniería, a la que ningún emisario de letras había acudido desde tiempos inmemoriales. La gente nos recibió optimista, comprensiva; estaba de acuerdo con nosotros. Varios nos siguieron. La prueba está que el viernes, habiendo planeado todo con algo más de un día de anticipación, fueron 5 veces más personas de lo que habíamos esperado (1).
Por supuesto, el siempre conchudo y caradura Rey, avalador, defensor y aliado de la dictadura fujimontesinista, múltiple tránsfuga (fujimorismo, ppcismo, lourdesflorismo, renovación y pseudoaprismo, y otros más que no recuerdo), que hace uso de su investidura para difamar abierta y salazmente a nuestra universidad y dejar en claro que es un intolerante, pues está en desacuerdo con el pluralismo y librepensamiento que nos caracteriza, afirmó cínicamente que somos nosotros los intolerantes por hacer un plantón de corte ordenado y pacífico para manifestar nuestro abierto repudio a su neardenthálica, represiva, exclusora y fundamentalista postura. Es decir, mientras él puede DIFAMAR a la universidad haciendo uso de investidura, osotros no podemos responder, porque si lo hacemos -apelando a nuestro derecho-, somos intolerantes. A menos que usted le deba al santo, señor Rey, sabrá que los derechos de uno terminan cuando irrumpe sobre los derechos de los demás, por tanto usted no tiene derecho a difamarnos, y menos a decir que somos intolerantes por hacer uso de nuestra libertad de expresión, la misma que está empecinado en reprimirla, como hace el Opus Dei en la Universidad de Piura, "universidad" en la que los libros y proyectos de investigación son revisados -y muchos vetados-, en la que se controla la vestimenta y la forma de pensar de los internos, y en la que se excluye a los alumnos hijos de padres no casados por la iglesia o divorciados, lo mismo que docentes no practicantes, cónyuges, etc. (2).
Reconozca, pues, señor Rey, abiertamente, que usted está en contra del pluralismo académico, el mismo que permite desarrollar un pensamiento crítico -inalcanzable para ciertos periodistas del cable y la señal abierta, como ya veremos más adelante- que nos capacita a discernir lo conveniente y no conveniente de cada postura, ideología y credo, pluralismo que permite que personalidades distinguidas del mundo como Richard Bernstein, Noam Chomsky y el Dalai Lama nos visiten y celebren fiestas académicas en nuestro campus. Reconozca usted, como miembro de aquesta secta centrósofa, elitista y con ínfulas monopolistas, que está en contra de la Teología de la Liberación, del profesor emérito RP Gustavo Gutiérrez, de Felipe Zegarra Russo, de todos los jesuítas y distintas agrupaciones religiosas dentro del catolicismo -por ejemplo, el Hogar de Cristo-.
Creo que ha quedado claro que nosotros no hemos marchado contra la religión católica, de la que muchos de mis compañeros profesan, sino en contra de aquellos funestos, corruptos y malos representantes que pretenden interferir con el pluralismo bienamado característico de nuestro espaciotiempo. Creo que la PUCP y sus estudiantes han demostrado que pueden ejercer sus derechos con responsabilidad, orden, respeto y disciplina, pues nos cuidamos de no rebajarnos al nivel de otros cenizos pero no maduros difamadores, conservando el orden y la cordura en todo momento.
Incluso ante los piquetes de aquellos pseudoprofesionales periodistas que buscaban el sensacionalismo mantuvimos la serenidad. Por la noche, durante la emisión de su tristemente célebre programa periodístico, la siempre descriteriada Chichi Valenzuela se opuso a nuestra manifestación, repitiendo el discurso cínico rafaelreísta de que nosotros somos los intolerantes. Además, pretendió burlarse de que esa no era la casa del mitómano y andrógino Ministro de la Producción, perdiendo todo el criterio que debiera haber ganado con los años. Es obvio que un portero no dirá "Sí, acá vive". Por algo le pagan, para que vele por la seguridad de aqueste insufrible y cada vez más repudiado personaje. Te falta seso, Chichi, francamente.
Con todo, quiero agradecer a los casi 500 (3) compañeros universitarios que, conscientes de que el silencio era un apoyo tácito y cómplice al Opusdeísmo-conservadurismo pensamiento Cipriani, asistieron a esta manifestación pacífica que demuestra, ahora más que nunca, que la Católica está unida en contra de la opresión fundamentalista que pretende restringir las libertades políticas, ideológicas y sexuales de las que gozamos como individuos del siglo XXI. Quiero agradecer también a la FEPUC, a los CF de todas las Facultades de la PUCP, a la UNMSM, que mostró su solidaridad con nosotros, y a todos nuestros amigos conscientes que con banderolas, pancartas, bombos, caras pintadas y corazones valientes denunciaron y reclamaron con sus jóvenes voces por la libertad.
Finalmente, quiero invitar a todos a un acto simbólico que se celebrará mañana Domingo de Ramos frente a la Catedral de Lima, acto pacífico que mostrará como es que nos quiere tener el Opus Dei, es decir, silenciados. La cita es a las 10am, en Plaza de Armas con Jirón de la Unión. Esperemos que vayan a apoyar esta causa democrática (4).
Y con respecto al litigio, esperemos que sea la universidad la que resulte victoriosa, lo que sentaría un precedente, un hito histórico, que marcaría por fin la independencia del poder político sobre el eclesiástico, la independencia del poder judicial sobre la turbia injerencia de aquellos malos clérigos deseosos de poder.
Notas.
(1, 3). Pese a que la noticia es sobre la opinión de Rafael Rey, el comercio afirma que asistimos 500 universitarios a la manifestación. http://www.elcomercioperu.com.pe/EdicionOnline/HTML/olEcUltimas/2007-03-30/olEcUltimas0000553.html
(2). Ver el vídeo en Youtube: http://www.youtube.com/watch?v=ooky_eOGkh8. Aquí sale nuestro amigo Diego, advirtiendo en lo que podría convertirse la PUCP si el Opus Dei interviene como tiene planeado.
(4). ¿Más información? Envíenme un correo a manulojose@hotmail.com

lunes, marzo 26, 2007

Annyong ha shimnikka, Corea.


Histórico. Perú logró su primera clasificación a un cita mundialista -en cualquier categoría- tras 26 años de espera. (1)


"Estos chicos no tienen espermatozoides, tienen anchovetas." Entusiasta Philip Butters en alusión al milagro de la sub 17 de Jota jota. (2)


¿Será coincidencia? La prensa peruana no le dio la menor importancia a los muchachos de la sub-17, quizá por no anidar más ilusiones al sufrido público peruano, vacunado ya de tantos sueños mundialistas incumplidos, destruidos por una realidad tan paupérrima como la calidad de vida de la mitad de nuestra gente, tan miserable como nuestra educación, y tan vergonzosa como la corrupción que sigue pululando en todas y cada una de nuestras instituciones -el fútbol no se salva-. La prensa no le prestó atención a los chicos, como se dijo, en los primeros días de trabajos silenciosos de aclimatación en suelo ecuatoriano. Se ganó a Brasil, pinpám pum, se goleó a Bolivia, pompompón, y rarrará, aparecieron aquestos.
Ahora, por supuesto, tampoco hay que creérsela. Todavía existe Burga, todavía existe una selección que prefiere especular en partidos FIFA con sistemas experimentales (3-3-3-1 ante Japón: Forsyth encajó dos), y todavía los equipos nacionales dan vergüenza en la Libertadores...

Pero por lo menos podemos darnos un momentito, chiquito, bonito, y gritar Arriba Perú Carajo. Buena, chiquillos.

Notas.
(1) Ver elcomercioperu.com
(2) Philip Butters en El Especialista, 26/03.

Recomendados.
Vea un flash con las fotos de la celebración: http://www.elcomercioperu.com.pe/especiales/perusub17/portada.html
Vea la tabla final: http://www.peru.com/Futbol/sub17/ecuador2007/torneo/final.asp

miércoles, marzo 14, 2007

Rogelio Aguas y Juan Alberto Mejía

Anochecía en San Isidro, yo entraba al siempre caótico y dantesco submundo del tránsito limeño. Sin embargo, esta vez fue distinto. Las insoportables sirenas y vocinas, los carajos al aire, el calor de mierda de camiones de pollos humanos que ya ni pían por un mínimo de privacidad y decencia no estaban presentes, o por los menos se vieron reducidos y aplacados por un octagenario trovador.

Este viejo simpático amenizaba a los pasajeros desde Chorrillos, ni más ni menos. Había pasado más de treinta minutos cantando con tecla y animosa voz, mientras los espectadores le respondían con sonrisas y suspiros de antañas vivencias crepusculares. Tangos, congas, algunos valses. Marineras y huaynos. El anciano sabía todo, y con una sonrisa descubría su rostro de patriarca bonachón.

Se quejó de la suerte de un tal Rogelio Aguas que cobró 200 dólares por entrada a un concierto en un estadio de la capital, mientras él le trata de sacar la vuelta al hambre, a la edad y a la indiferencia con los chelines humildes de las mujeres empáticas y los hombres nostálgicos que aplauden con cariño y celebran con copiosa admiración la destreza musical de sus preclaros acordes y certeras letras.

Se burló también de esos acróbatas sin imaginación que confunden el arte de la composición musical con fulgores sexuales repetitivos y mensaje ninguno -los reggaetoneros-, brindándoles una verdadera lección de historia, de cultura y de arrostre a la vida a los imberbes rostros que observaban con extrañeza a ese cándido abuelo cantor de grandes gafas, cenizo cabello y compasiva mirada.

Finalmente, partió, luego de ofrecer al complacido público dos o tres canciones más de las que prometió en su inédito concierto. Hubieron miradas perdidas y silencios otoñales tras su partida. El viejo había cautivado a todas las almas en derredor. Tuve que preguntarle su nombre, tan sencillo como su vestir, tan humano como su cantar. Juan Alberto Mejía, mucho gusto, caballero, y gracias.


No será Rogelio Aguas, pero vaya que hizo un gran concierto. Con la gracia de la providencia habrá hecho algunos soles en lugar de doscientos dólares por entrada, pero dejó mayor huella que cualquier jilipollero rockero advenedizo que haya pisado jamás las sombrías veredas de nuestra capital. Y es que todavía existen hombres que valen la pena conocerse en este mundo de seres inanimados.

sábado, febrero 17, 2007

Sepia no hi

Hoy redescubrí la radio, la semana pasada las películas por cable y hace un mes el piano. Sigo siendo el mismo despistado que enumera evidentes descubrires y que sin embargo nunca los advierte hasta que le caen del cielo. Tal es el caso destas tres actividades ya mencionadas, que junto con el regimen dietario eficiente, un trabajo entre comillas y una huachafienta moda de pseudo yuppie -de lentes y camisa, irreconocible- conforman mi batraciana vida dosmilsietera.
Hace buen tiempo me peleé con el mundo y sobre todo contigo, y ahora, luego de meses sin recibir mensajes de texto, llamadas ni saludos por el messenger a no ser que sean anuncios, citaciones, confirmaciones o spames, siento que ya no sé socializar, que ya no sé ni siquiera cybersocializar con esos seres extraños que alguna vez fueron mi especie. Los días son tranquilos, sepias. Pasan las páginas, los canales y las estaciones como pasan las horas, los minutos, la vida.
Abandoné la escritura porque dejé de vivir. Y aunque quisiera retomarla, las ideas se me rebobinan casi sin querer. No es que no aparezca ninguna, pocas veces me ha ocurrido aquello, sino que, quizá con más contundencia, en estos momentos estoy más disperso, y con ello simplemente obtengo cementerios de buenas ideas inconclusas. Sí, pasa así siempre, sobre todo cuando termino escribiendo, y por supuesto tengo que cambiar de tema. Y por supuesto, siento que la fuerza se me va y se me diluye en ideas que nunca llego a transmitir, como si en vez de pasar el agua por un embudo la pasara por una coladera y al revés.
Me acompañan esos cuadriculados galanes deslumbrados por simpaticas y espontáneas orates, esas copiosas canciones setenteras de historias tiernas y amores imposibles, y esa robusta profesora de música que solo habla de ti. Por qué será que todavía te encuentro, cuando hace tanto te extravié.

domingo, febrero 11, 2007

"Si puedes vivir sin escribir, entonces no escribas"
Gabriel García Márquez

Sucede que no he vivido hace mucho.
Un Muerto