Nuevamente quise no despertarme tan temprano
y quise robarle más sueño a los minutos,
para no aturdirme tanto en repensarte.
para no agobiarme tanto en representarte,
para no cansarme de intentar descansar de ti.
Nuevamente desperté con las dudas en la cabeza.
Y quise alejarlas de mi pensamiento,
pero cada que pueden regresan más intensas,
pero cada que pueden se incrustan más, violentas,
pero cada que pueden aturden más el corazón.
Nuevamente respiré el aire entrecortado, agónico.
Mientras caminaba por las calles desiertas, ajenas.
Y quise reconocerlas contigo de mi lado.
Y quise caminarlas contigo de la mano.
Y quise respirarlas con tu aliento en derredor.
Nuevamente te soñé despierto entre la gente.
Me ausenté del tiempo y del espacio, distante.
E imaginé tus cabellos de tórrido azabache.
Y soñé con tus ojos contemplándome.
Y recordé tus labios besándome.
Y durante el día escuché treinta canciones de la radio asociándolas a ti.
Y durante la semana respondí cien veces el teléfono contestándote a ti.
Y desde que te conozco, intenté leer mil libros en vano para no pensar en ti.
Y nuevamente regresé a mi casa con ausencia de ti.
Nuevamente me acosté en mi cama queriéndote aquí.
y quise robarle más sueño a los minutos,
para no aturdirme tanto en repensarte.
para no agobiarme tanto en representarte,
para no cansarme de intentar descansar de ti.
Nuevamente desperté con las dudas en la cabeza.
Y quise alejarlas de mi pensamiento,
pero cada que pueden regresan más intensas,
pero cada que pueden se incrustan más, violentas,
pero cada que pueden aturden más el corazón.
Nuevamente respiré el aire entrecortado, agónico.
Mientras caminaba por las calles desiertas, ajenas.
Y quise reconocerlas contigo de mi lado.
Y quise caminarlas contigo de la mano.
Y quise respirarlas con tu aliento en derredor.
Nuevamente te soñé despierto entre la gente.
Me ausenté del tiempo y del espacio, distante.
E imaginé tus cabellos de tórrido azabache.
Y soñé con tus ojos contemplándome.
Y recordé tus labios besándome.
Y durante el día escuché treinta canciones de la radio asociándolas a ti.
Y durante la semana respondí cien veces el teléfono contestándote a ti.
Y desde que te conozco, intenté leer mil libros en vano para no pensar en ti.
Y nuevamente regresé a mi casa con ausencia de ti.
Nuevamente me acosté en mi cama queriéndote aquí.
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