lunes, octubre 31, 2005

Regionalización: ¿se frustró el progreso o nos libramos de una mala planeación?

Se está acusando al APRA de ser el autor intelectual de un boicot en contra de la Regionalización, cuyos objetivos, a gran escala, beneficiarán a todos los peruanos. Ruego ante todos un momento de reflexión. Este es un tema importantísimo, la regionalización no se trata de votar por el sí, simplemente, requiere una planeación objetiva, apoyada en estudios científicos, análisis económicos, sociológicos y antropológicos, cosa que, acéptenlo o no, no se ha hecho a cabalidad. La deserción de Moquegua lo puso de manifiesto.

Se dice que es el APRA el autor de este revés en el progreso, por cuestiones de coyuntura política, de acomodo. Muy aparte del aprismo, yo creo que el trasfondo de todo esto tiene un asidero no tanto político, sino más bien moral, básicamente de coherencia. Yo lo veo así, no sé como ustedes puedan tomarlo. Un plan debe estar correctamente estructurado, esquematizado, elaborado, todo esto claramente definido, por supuesto. Cabe, entonces, la siguiente pregunta: ¿esto se hizo así? Se supone que el gestor de todo esto ha sido el ejecutivo, e, indefectiblemente, la cabeza del ejecutivo es el presidente de la república, quien lejos de haber mostrado su ineptitud en una amplia gama de áreas del saber, sobre todo el de saber comportarse a la altura de su investidura, ha dado dos grandes muestras de su profundo desconocimiento en el tema. Me refiero a sus dos burradas. La primera, el decir que votaría por el sí, que en realidad es una doble burrada, porque abiertamente sentó una opinión, lo que está prohibido, pero esto no es lo más grave, sino que, radicado en Lima hace varios años, él no puede votar, porque a los ciudadanos radicados en Lima no les corresponde votar. La segunda, como para que ya no queden dudas de su soberana estupidez, fue decirle al pueblo cajamarquino que se apreste a votar, cuando todos sabemos que a Cajamarca tampoco le correspondía participar en estos comicios. Queda profundamente claro, entonces, que el presidente no tenía idea del plan.
Por otro lado, dudo mucho que las ventajas del sí hayan calado de manera consistente en las poblaciones a las que les correspondía votar. La gente, más que oponerse a la regionalización, señores, se ha opuesto a la improvización, a la chanfaina politiquera del partido de la chacana por conseguir votos para las próximas elecciones. Nadie creo, en su sano juicio, está en contra de la regionalización, de sobra sabemos todos que unidos tenemos más fuerza. Ya lo dijeron Bolívar y Haya de la Torre. Sin embargo, no podemos dar pasos en falso, el Perú necesita planes organizados, coherentes, claros, y también necesita que los mismos sean difundidos de manera cabal hasta el más lejano confín de la periferia. Todos queremos y auguramos la regionalización, pero queda claro que el Perú no va a tolerar más improvizaciones, el pueblo ya las ha sufrido bastante con gobiernos que no estuvieron a la altura, y me refiero claramente a Alan García, quien junto con Fujimori tuvieron los dos peores gobiernos de la historia, el uno en el ámbito económico, el otro en el moral -y no por ello menos importante, o mejor dicho, o no por ello menos nefasto-.

La regionalización es el futuro, ciertamente. Pero habrá que trabajar mucho para elaborarla de manera consistente. Sé que con comparaciones con el fútbol pareceré un leguleyo más del montón, florero sin remedio, pero si no se comienza a trabajar desde menores, no se puede llegar al mundial. La misma idea se desprende para la regionalización. Hay que trabajar mucho, señores, no se trata de agrupar a la volada 2, 3 o 4 departamentos cercanos y a tontas y a locas convocar a un referéndum para unirlos, se trata de concertar, de elaborar planes de desarrollo, de fomentar focos de cohesión, de encaminar a las futuras regiones a actividades económicas similares o complementarias, para que los antiguos departamentos que las compongan interactúen de manera permanente, se trata de potenciar actividades económicas, permisos, construir carreteras, etc. No es algo de un día para el otro, es todo un plan de desarrollo para el país que requiere de un trabajo mental de un grupo diversificado de profesionales en distintos ámbitos, comandados no solo por el frente político, sino a la par de organizaciones empresariales y sindicales. Queda, entonces, peruanos, mucho por hacer.

sábado, octubre 29, 2005

Puntos suspensivos I

X despierta, desganado, abatido, cabizbajo. Trata de no levantarse, juega con las sábanas, acurrucándose, hasta que la monotonía termina por desesperarlo. El ruido de los pájaros, entonces, lo llama a levantarse, más allá de los rayos de sol que hace buen rato destilan su calor por entre los cristales de la ventana. Con cada respiro intenta, por un lado, recobrar las fuerzas que le permitan recuperarse, con cada suspiro, empero, las regresiones se le impostan y lo hacen retroceder hacia la cama. Depresión.

X experimenta, entonces, un desvarío. Se harta de sus conflictos internos, toma la bicicleta, llena una botella de agua en la cantimplora, y sale en búsqueda de su identidad. Pasea aquí y allá: en los parques comparte los últimos rayos de sol con las mariposas y las aves, conecta sus latidos a los trinos de las palomas y pisa fuerte el pedal. Ahora está en la playa, observando la majestuosidad del sunset. La brisa le produce un agradable frío en sus mejillas. El rugir de las olas se conmutan con su entrecortado respirar, y una escueta lágrima, desciende temerosa. El tiempo se detiene, el sol ya se ocultó, no hay sonidos alrededor, solo su agitado corazón resuena. La lágrima temerosa ya se extinguió, y ha sido reemplazada por otras más vigorosas.

La soledad, esposa del silencio, le brinda a X su sutil y desinteresada compañía. Los sollozos han acallado, la quietud reina, mientras a lo lejos la oscuridad comienza a imperar en el cielo. Entonces X toma la cantimplora, bebe media botella y emprende la vuelta a casa. La tristeza no lo ha abandonado, su respirar acongojado sigue acompañando su lento pedalear. Llega a casa, deja la bicicleta, termina su cantimplora y marcha a su cuarto.

La quietud se apodera del ambiente ya cargado. X abre la ventana. A lo lejos, la noche sin estrellas. Más cerca, en su aposento, el silencio lo invita a reposar. Toma las sábanas, se recuesta, y de nuevo el miedo y la nostalgia inquietan su atormentado corazón.
Ahora duerme, pobre y débill X. Faltan muchas horas como estas, días, meses. Ahora duerme, pese a la tristeza. Y mañana despierta a la verdad. Por el momento, solo duerme, descansa, ya habrá mucho tiempo para pensar.

Una mentira blanca y un momento sublime

No pudo haber sido mejor el homenaje al reconocido, estimado y brillante dr. José Agustín de la Puente Candamo. Todo comenzó como una mesa de debate, en la que ni él ni el público -salvo los propios estudiantes de historia de la PUCP- tenían idea del motivo real por el que se había expuesto la mesa.

Procederé ahora a resumir muy brevemente su magistral ponencia, parafraseándolo:

La Identidad Nacional


El Perú es una persona, no una vacilación ni una ambigüedad. El Perú se ha hecho en la historia: es un fruto de milenios.

En el siglo XIX no se tenía idea de la antigüedad milenaria. Posteriormente, ante el trabajo incansable de Julio C. Tello y diversos arquéologos, antropólogos e historiadores, se fue cimentando esta idea, ya bien entrado el siglo XX, de modo que fue un gran aporte a la construcción de la memoria peruana.

¿Qué nos dio el mundo andino? La unida del territorio, a pesar de los conflictos entre el imperio incaico y sus pueblos anexados, lo esencial fue integrado; las enseñanzas: conocimiento en metalurgia, ingeniería, agricultura y ganadería, entre otras; la originalidad, un origen digno de renombre y orgullo. El mundo andino es la patria milenaria.

El punto de inicio de la nación peruana no fue el Tahuantinsuyo ni la Conquista, ni tampoco el Virreinato o la República, fue el encuentro entre Francisco Pizarro y Atahuallpa. A partir de allí, la convivencia del indio, el negro y el español, inconciente y espontáneamente, fue formando una nación en conjunto -inconcientemente, claro está, porque nadie sabía a ciencia cierta de que esto acontecía, pura espontaneidad-. El primer peruano de la historia, entonces, fue el Inca Garcilazo de la Vega, personaje que se sentía doblemente enorgullecido, tanto por su ascendencia real indígena, como por su ascendencia española. Y podemos hablar de varios peruanos ilustres, como Hipólito Unanue, quien bien podría ser el peruano de la segunda mitad del siglo XVIII y la primera mitad del siglo XIX, por sus obras especialmente peruanas, como El Clima de Lima.

Esta nación se fue creando espontáneamente, como ya se dijo, y se manifiesta en distintos aspectos de la realidad, como Basadre hablaba de la transformación del paisaje: los algarrobos y los olivos, las chirimoyas y las fresas, las llamas y las mulas, el maíz y el trigo; como Martha Hildebrandt lo señala en su fundamental contribución, Peruanismos, en la que refiere la peculiar evolución que el castellano -y ojo, algo tan duro como el lenguaje, tampoco puede resistirse a la mixtura cultural- experimentó en nuestras tierras. Por otro lado, Carlos Paeja Paz Soldán, esbozó una frase formidable: "El Perú que deja La Serna no fue el mismo que encontró Pizarro".

El Perú, pues, claramente, es la síntesis de lo andino, lo negro y lo español. El pueblo y hasta algunos historiadores, extremistas ellos, hacen una mala interpretación de la historia. Los peruanos tendemos a negar los hechos negativos y funestos. Entonces, se crea un Perú ahistórico, utopista. No debemos negar nuestro pasado, es nuestro, pese a los muchos hechos sangrientos que marcaron nuestra historia. Debemos asumir nuestro pasado, y enorgullecernos de pertenecer a una tierra cuyo pasado es uno de los más ricos del mundo.


Fin de la participación del doctor. Los asistentes aplaudieron cerca de dos minutos. Un estudiante de historia se acercó al escenario, y bajo "Código H", reveló el motivo real por el cual se había convocado a la mesa. Margarita Guerra, entonces, elaboró un discurso notable, en el que homenajeó de manera sublime al gran maestro. Dejó en claro la manera tan sublime en que el dr. José Agustín de la Puente Candamo estudia, enseña y hace historia. Destacó el enfoque tan humano con el que el maestro toma la historia y los personajes, la microhistoria. Erik Devoto no desentonó. Por el contrario, su discurso fue muy emotivo. Se confesó un hombre muy sentimental, pese al estereotipo del investigador historiográfico, llamado a la objetividad, siempre frío. Erik nos habló de un gran hombre, una gran persona, un profesor genial, un historiador notable y un maestro excepcional. Nos habló de un hombre con una vocación inacabable, con un profundo amor a la historia, a la peruanidad. Nos habló de un hombre emotivo, optimista. Un historiador profundamente humanista, con la capacidad para meterse en los zapatos tanto del personaje que hace historia, como del ser humano común y corriente que vivió en esta y otra época (aquí podemos hacer una similitud con Basadre, claro está), y con la capacidad para hacer que sus alumnos lo hagan. Esto, sobre todo, es su gran aporte. Un gran aporte que dio a varias generaciones.
Y aquí, me incluyo en el homenaje, porque, muy a pesar de que no estudio historia, tuve la gran suerte de llevar un curso con él, de como bien dijo Erik Devoto, disfrutarlo como profesor.
Erik Devoto, cerca del final de su participación, dijo: Mi madre decía que existían dos tipos de personas: las abejas y las moscas, aquellas que viven en búsqueda de la miel, y aquellas que urgan en la basura. Con todo esto, usted, dr. José de la Puente Candamo, es una gran abeja.
Para finalizar, agradeció al hombre que dedicó toda una vida a la historia, a sus alumnos, y principalmente, a la patria, al Perú.
Y yo, que tenía a mi costado a José de la Puente Brunke, le dije: ¿qué se siente ser hijo de la historia? Sonrió y me dio la mano.

Gracias por siempre, José Agustín.

viernes, octubre 28, 2005

Identidad Nacional, parte III. Fin

Por dios, qué mala suerte hemos tenido los asistentes al coloquio. Si ayer pensamos que los errores fueron producto del estrés del primer día, hoy corroboramos que fue más bien la desorganización. Asistí a la primera ponencia del día, a las 9:20am, por un retraso producto de la organización, sin embargo, la ponencia que se brindó fue la segunda. ¿Cambio de planes? Beto a saber. Por otro lado, en la mesa de debate faltó Margarita Suárez, y para colmo, los ponentes, por más que son personajes de renombre, valgan verdades, no estuvieron a la altura. Cada uno corrió por su lado, divagaron y se perdieron en otros temas, que poco o nada tenían que ver con el tema del debate, por increíble que parezca. Tanto Miguel Marticorena como José de la Puente Brunke son, evidentemente, profesionales a carta cabal, probos, distinguidos y reconocidos. No obstante, y lamentablemente, la ponencia no estuvo a la altura que sus afamados nombres profesan.


Elementos Virreinales de la construcción de la Identidad Nacional

Es evidente que el tema hacía referencia a la influencia de la cosmovisión, cultura y pensamiento peninsular en el desenvolvimiento de lo que a la larga se llamaría peruanidad. Oh! Sorpresa! Ninguno de los dos lo tocó seriamente. Ya hablaremos de los errores de enfoque de los dos ponentes.

Participación de Miguel Marticorena
Nadie pone en tela de juicio la producción y la obra de esta institución viviente, un verdadero inacabable profesional. Sin embargo, se remitió, someramente, a señalar los aspectos componenciales del estado, que son, claro está, la soberanía, el territorio, la población, la lengua, la economía, la religión, el pasado (la historia) y el futuro (proyecto nacional). Estos criterios son dominados por cualquier persona medianamente entendida en el tema, de sobra carecen de profundidad temática.
Si bien es cierto Marticorena hizo una interesante diferenciación entre nación y nacionalidad, por ejemplo, desperdició tiempo valioso de la ponencia en análisis políticos aislados, que ni siquiera se molestó en entrelazar, para por lo menos dar una referencia de contigüidad que nos lleve a asociarlos con criterios afines al tema en cuestión.
Indicó que hay una relación muy directa entre la lengua y la nacionalidad. Con respecto a la nación, la definió como la suma de distintas nacionalidades presentes en un país.
Someramente, planteó la idea de la política del buen ejemplo, sistema social embrionario de la colonia, que en un principio incluyó a españoles e indios en los mismos corregimientos, poblados y casas. Luego de detectarse el abuso de los primeros para con los segundos, Belisario de las Casas propulsó la división del estado en la república de indios y en la república de españoles. La división jerarquizó el sistema social, propició la separación, la separación la distancia, y esta el beligismo. Con la llegada de la independencia, supuestamente, estas repúblicas se condensaron.
Marticorena, en síntesis, acusó el peso de la edad, siendo extremadamente juicioso, quizás muy severo en la crítica. Su ponencia se vio matizada por pequeñas ocurrencias, como que al declamar llevaba el micrófono fuera del alcance de su voz y le tenían que hacer señas para que se diera cuenta de ello. Se perdió en vericuetos aislados de la política, opinó de Olivera, Toledo y Fujimori. Se le disculpa todo, empero, por su simpatía aprista hayadelatorreana.

Participación de José de la Puente Brunke
Los vastísimos años de distancia entre los ponentes nos permitieron augurar que el más joven de los dos tuviese la varita mágica de la lucidez para centrarse en el tema. Una jugarreta de la mala suerte: De la Puente Brunke se limitó a definir, analizar y comparar las tendencias historiográficas que intentan e intentaron definir el concepto de identidad nacional. Ojo: entiéndase que evadió el tema de fondo, se centró en la forma y no en el fondo. Señaló las diferencias incontrastables de los hispanistas o conservadores y los contestatarios (indigenistas). Al criticar la vaguedad con la que algunos historiadores, pero sobre todo el vulgo se limitaron a categorizar a los "buenos" y a los "malos" (indios y españoles, respectivamente, según la copiosa y ultrachauvinista posición etnohistórica-antropológica), no cayó en la cuenta de que su propia ponencia pecaba de vaga. Luego de finalizar su exposición, un joven, con todo derecho le preguntó: ¿cuáles, pues, serían esos elementos virreinales de la construcción de la identidad nacional? Aquí, se evidenció la falta de relación de los ponentes con el tema citado. Comentaba cada detalle de esto junto a una etnohistoriadora que se sentó a mi costado, y nos pareció sumamente risible todo, anecdótico, pintoresco.
Al final me le acerqué a De la Puente Brunke, y con todo respeto, le manifesté mi opinión. Se disculpó, diciendo que, en efecto, el tema se había descentrado. Me recomendó dos textos, a su juicio, fundamentales. El primero de un hispanista a capa y espada, como lo fue Carlos Pareja Paz Soldán, Obras Completas, Tomo I (y único porque murió joven); y el segundo del integracionista, postura bastante coherente dicho sea de paso -a buen entendedor pocas palabras-, Ventura García Calderón, en sus Páginas Escogidas.

Haré un esfuerzo por resumir, concretamente, la identidad nacional en base a las ponencias que se dieron en el "XV Coloquio Internacional de Estudiantes de Historia PUCP".

Para empezar, es en parte cierto y en parte falso la idea de las distintas identidades, como aglomeración de diversidades étnicas, antropológicas, etnohistóricas. Y es en parte cierto y en parte falso porque ése es un problema de forma y no de fondo. Es un problema de divergencia de términos, simple y llanamente.

Aquí, me remito a José de la Puente, pero no Brunke, sino Candamo, y su concepción de peruanidad como el mestizaje, la mixtura, a aculturación producto de la interacción de los pueblos, cosmovisiones y realidades andinas, peninsulares, africanas e incluso chinas, japonesas, italianas, francesas, inglesas y alemanas que, siglos más, siglos menos, han ido cocinando la idea de peruanidad. El Perú es rico por su diversidad, es cierto, es rico por las múltiples nacionalidades, como han dicho ya Marticorena y Curatola. Pero el Perú no podría llamarse Perú sin el aporte fundamental y compartido, simultáneo, de la influencia española y andina, básicamente, y negra y china en menor término, y japonesa, italiana, inglesa, francesa y alemana en una pequeña fracción. El mismísimo término 'Perú' es mestizo, puesto que nace de una confusión de los alófonos "Berú" y "Pirú", por parte de los españoles conquistadores y los indios de las costas norteñas de sudamérica.

Quitémonos, pues, de la cabeza que el Perú es indígena, o que es español. Es todo eso, pero ninguno por separado. No podría entenderse el Perú sin el aporte de lo español, que se traduce en 300 años de virreinato, sistemas políticos, culturales, sociales, etc. Ni mucho menos sin el aporte de lo andino, que supone más de 3000 años de tradición.

Es la suma de estas dos posturas, una postura integracionista -que lejos de prolongar indefinidamente el sesgo entre hispanistas e indigenistas busca limar sus asperezas-, la más acertada, la más coherente, la más exacta.

Sintámonos, pues, orgullosos de lo andino y de lo español, de lo español y de lo andino. Cotejamos de una vez por todas y para siempre que, para lograr una identidad nacional, la integración es lo que debe primar, por antonomasia, por definición. Nosotros no podemos ser nosotros, sin los otros. Tengamos eso presente, incluso dentro de nuestro país, y aquí retomamos la postura etnohistórica de las múltiples identidades y nacionalidades que conforman la gran nación peruana. No caigamos, pues, en problemas de forma. Revisemos la profundidad, el trasfondo, resaltemos la importancia de lo español y de lo andino, de lo andino y lo español.

jueves, octubre 27, 2005

Identidad Nacional, parte II

Resumo, aquí, la mesa de debate del día de ayer del Coloquio Internacional de Estudiantes de Historia:

Elementos Andinos en la construcción de la Identidad Nacional

Como ya les había adelantado, se había programado a María Rostworowski, sin embargo, a última hora ella no pudo asistir, y en su por así decirlo "reemplazo" -o mejor dicho, superposición, porque son profesionales distintos, con lógicas, ópticas, enfoques y perspectivas distintas, por ende- participó Juan Ossio. Lo acompañaron Marco Curatola y Liliana Regalado. Dos antropólogos y una historiadora. Consecuentemente, el enfoque fue a todas luces etnográfico y no tanto historiográfico, y eso en esencia no es malo, pero uno ya se había hecho la idea de que lo iba a ser, y la sorpresa nos sacó de cuadro a los asistentes.

Vamos al grano.

Participación de la Doctora Liliana Regalado
Como bien expuso la doctora Regalado, la historia debe aportar a la consolidación de la identidad nacional. Sin embargo, ¿qué es la identidad nacional? La doctora, entonces, desarrolló la idea de la multiplicidad, definiendo varias identidades nacionales, en una paráfrasis a Franklin Pease en su frase "existen varias maneras de ser peruano", que adaptó de la siguiente manera: "existen varias maneras de ser andino". Esta idea, posteriormente, fue compartida y desarrollada posteriormente tanto por Ossio como por Curatola.
Rechazó la idea decimonónica de la historia, simplista, tradicional, hispanista -y aquí hacemos referencia no tanto a la defensa de lo español per se, sino más bien a la crítica abrupta, visceral y febril de lo indígena, basada en la incomprensión, en la intolerancia, en la indeferencia de criollos que se tildaban así mismo de conocedores del Perú, cuando en realidad escribían siempre desde Lima-.
Planteó que desde los años 60 y 70 hubo una urgencia, una carencia. Distintas corrientes de pensamiento advirtieron la ausencia y la necesidad de la consolidación de la identidad nacional. Así, pues, tanto modelos como manifestaciones andinas fueron identificándose como algo profundamente peruano -claro, después de haber negado sistemáticamente al indio, condenándolo, señalándolo, renegándolo-.
En el siglo XXI, es el siglo del desarrollo de la diversidad, desde las ciencias duras hasta las ciencias sociales y del espíritu. El siglo XXI nos exige voltear la pregunta inicial, ¿qué es la identidad nacional?, y redefinirla en un contexto de goblalización, en un nuevo mundo de diversidad.
La doctora Regalado hizo referencia a la presencia de distintas memorias en el inventario popular, nacional. Mencionó que la historia, desde lo social, demanda una organización de esas distintas memorias, y actúa como seleccionadora, mediante un trabajo metódico y sistemático que exige investigación, análisis y comparación de datos, estudio y dedicación.
Manifestó la necesidad de reconocer a los otros. Con respecto al mundo andino, lo calificó como el depositario de las tradiciones, pero a la vez del cambio, del cambio a través de la tradición. El hombre andino no debe ser visto solamente como objeto de estudio, sino como un individuo connacional, conciudadano.
Finalmente, la doctora dijo que el pasado no debe ser una carga pesada, debe ser una memoria integral que nos permita identificarnos, mediante un acto reflexivo, debemos, pues, asumir el pasado, integrarlo, conocerlo.

Participación del doctor Marco Curatola
Marco Curatola compartió la idea de la multiplicidad, señalando que el concepto de identidad nacional no es más que un compendio de distintas identidades, una de ellas, y ¡vaya, qué importante!, es la identidad andina.
Planteó, para empezar, la refutación del término Prehispánico al período previo a la conquista del Perú. Adució que más de 3000 años de una Historia Original Extraordinaria son suficientemente merecedores de un término propio que la represente mejor que "Prehispánica", y comparó 3000 con 300 años de dominación española.
Planteó, a su vez, la idea del uso político de lo prehispánico por parte de los mismos españoles para legitimar su poder. Así mismo, esbozó la idea de la manutención de la cultura y cosmovisión andina pese al dominio español, hablando entonces, de una cultura andina colonial.
Luego, se remitió a la independencia del Perú, que fue en realidad, como todos sabemos, qué duda cabe, la independencia de los criollos. Planteó aquí, pues, una idea de dualidad: separación de la idea de peruanidad con respecto a lo andino, la no incorporación de lo andino a la idea de lo nacional. Los libertadores animaban a las masas con frases como "no hay indios ni españoles, ahora todos somos peruanos", pero esto, incluso hasta nuestros días, relativamente, no se da. Ejemplificó esta dualidad haciendo una breve reseña de Clemente Palma y Andrés Avelino Cáceres, dos personajes antagónicos en su concepción del mundo andino, el primero por su odio casi irracional, que lo llevaría a postular la erradicación de esa "deplorable raza indígena", y el segundo por la praxis, por la defensa casi quijotezca y utopista, profundamente romántica de la patria en la guerra del pacífico.
Con respecto al indigenismo, lo calificó como una revuelta, un intento de reivindicación de lo andino. Lo asoció con las primeras migraciones del campo a la ciudad, algo que se consolida con la reforma agraria velasquista, que sentaría, pues, una de las primeras piedras de esta integración con el ande, pese a la reticencia casi asquienta de ciertos elementos intolerantes, absortamente peninsulares.
Finalmente, el doctor Curatola, siempre tan ocurrente y simpático, nos dio varios ejemplos de por qué todavía hoy en día, lo andino no ha sido del todo incorporado en la concepción de la peruanidad. El primer ejemplo, empero, no fue nada gracioso: las víctimas del terrorismo. Las masacres de campesinos andinos no se limitan a los últimos años de terror de nuestra historia. Ha sido una práctica sistemática a lo largo de la misma. La sociedad no ha incorporado todavía la concepción del ande en la conciencia nacional: se mantuvo indiferente ante la matanza de casi 70 mil personas. El segundo ejemplo, fue la conveniencia del uso de lo andino para cuestiones políticas, que se manifestó risiblemente en la toma de mando de Toledo en Macchu Picchu. Finalizó haciendo una broma, que comparto en su trasfondo: el dibujo de la portada del coloquio de estudiantes de historia tiene a Hitler, a Washington, a Pancho Villa, a Pizarro, a Einstein... ¿dónde diablos está Pachacútec?
Finalizó su ponencia con la idea casi populista de la andinidad como motivo de orgullo, de unión, de consolidación de la identidad -y aquí no quiero desmerecerlo, para nada, su ponencia fue brillante-.

Participación de Juan Ossio
Juan Ossio la tenía muy difícil. Tenía que llenar el vacío dejado por María Rostworowski en la mesa, ¡vaya tarea tan difícil!
Planteó, para empezar, una necesaria primera reflexión: ¿qué es lo andino? Planteó la necesidad de desoccidentalizar la concepción de lo andino, entender el ande en su propia expresión. Afirmó que hay un peso muy fuerte del pasado andino, de la tradición, del legado cultural. Luego, planteó una segunda reflexión: ¿qué es la identidad nacional? ¿acaso el Perú obtuvo su identidad como por arte de magia con la independencia? Rotundamente, no. La identidad nacional única que se quiso intentar en la independencia criolla no representó la verdaera formación de la identidad nacional. Creemos que esta identidad es un compendio de distintas y variadas identidades, precisó.
Ejemplificó la idea de la influencia de lo andino en aspectos tan peninsulares como las expresiones religiosas provenientes del cristianismo. Los santos sustituyeron a los apus, a los taytas. Esto implica una continuidad del sentimiento indígena, el misticismo, el animismo.
Resaltó que la identidad nacional no puede dejar de hacer referencia y mención a una conciencia ciudadana, y en ese sentido, hay una evidente falta de unidad para cohesionarnos y competir en el mundo globalizado. Afirmó que el país sigue invertebrado. La globalización nos hace retrotraernos, nos hace identificar manifestaciones de peruanidad para no sucumbir ante el mar de la globalización, monstruosamente impersonal. Ahora, pues, aquellos que renegaron el aporte de lo andino en la peruanidad están identificándose con él, catalogándolo como una verdadera y valiosa fuente de identificación de lo nacional. Aquellos que precisamente, años atrás, renegaron tajantemente de su influencia.

Últimas consideraciones
Liliana Regalado adució que hablar de identidad desde el punto de vista del territorio es una idea fracasada, obsoleta y naftalinosa del siglo XIX.
Juan Ossio afirmó que la exclusión de lo andino es el problema de fondo; la inclusión, por su parte, es el primer paso para lograr la unidad y las identidades nacionales.
Entiéndase la idea de identidad como la construcción de un edificio de varios pisos, varias maneras distintas de ser peruano.

Pregunta
¿Acaso la eliminación del indio norteamericano, la exterminación brutal que padeció el pueblo aborigen norteamericano, es peor que el vasallaje, la opresión, la denigración hasta la mínima expresión del ser humano vivida en nuestra tierra? ¿Podrían equipararse, en cierta manera, ambas monstruosidades de la historia? ¿no es acaso la muerte más sublime que ese castigo sistemático, ese otro tipo de muerte más sutil, por decirlo de alguna manera?
Mas que una pregunta es una invitación a reflexionar, es evidente que no se debe responder literalmente a la misma.

Identidad Nacional, parte I

Chema reportándose desde su cubil, aquí las 12:34am.

Pequeño recuento del día:
Hoy estuve dándole al marco teórico del trabajo de Desarrollo Humano II como un reverendo condenado, y ,previamente, hice la transcripción de la entrevista con el sr. Freddy Vásquez, especialista en suicidio y depresión que entrevistamos Maribel, José Ernesto y yo, ayer en el Hospital Honorio Delgado- Hideyo Noguchi. No hubo amanecer para mis cansados ojos, puesto que la transcripción me tomó varias horas, puesto que fue larga y muy productiva. Da gusto encontrar buenos profesionales, y más gusto todavía que te presten su tiempo de una manera tan amable, tan caritativa. Al final logré culminar mi parte del marco teórico. Asistí a la universidad, y entré a la clase de procesos cognitivos. A media clase me salí, puesto que me interesó pasar por el coloquio de Historia que se cursa en el auditorio de Humanidades hasta el viernes.

Ahora entro en el tema del día:
Asistí, pues, a dos de las ponencias del día. La primera -a la que asistí, claro, puesto que era la penúltima del día-, la de las 5pm, La falsa esperanza de una intervención exterior durante la guerra con Chile; y la segunda, la última del día, la mesa a cargo de Liliana Regalado, María Rostworowski y Marco Curatola, cuyo tema interesantísimo fue el siguiente: Elementos Andinos en la construcción de la Identidad Nacional.

Desgraciadamente la suerte no estuvo de mi lado. En la primera ponencia, resulta que el señor expositor, Óscar Palomino Flores, de la UNMSN, no pudo llegar a tiempo por motivos de trabajo, y si bien es cierto se leyó la sumilla y se hizo una crítica constructiva del tema a cargo del siempre encantador Parodi, no fue lo mismo. Y para colmo de males, en la mesa, tampoco pudo asistir la honorabilísima dra. María Rostworowski, y aunque su reemplazante, Juan Ossio, es un gran profesional, nuevamente, no es lo que uno hubiera esperado, claro está. -Aquí no pretendo comparar a la doctora María Rostworowski y al doctor Juan Ossio, sino que, simplemente, uno ya va con una idea y le resulta, pues, algo molesto tener que cambiarla sin más-.

Por lo demás, las ponencias no fueron malas, para nada, de hecho hago el comentario porque me parece importante resaltar el motivo de las mismas. Ambas tocaron un tema importantísimo, que no solo le compete a los profesionales de la historia y la antropología, sino a todos los humanistas, y a todos los peruanos: la identidad nacional.

Sobre La Falsa esperanza de una intervención exterior en la Guerra del Pacífico
Desgraciadamente, al haber llegado tarde, Palomino Flores no pudo exponer, solo se limitó a responder preguntas del público, por lo que su estudio no se pudo apreciar. Sin embargo, pudimos rescatar algunas ideas importantes.

1. Para empezar, una crítica a la alta sociedad de la época, responsable en grueso del fracaso en las negociaciones diplomáticas, en la empresa militar, una sociedad dominante pero no dirigente, una sociedad con una actitud falsaria y decadente, entreguista. Una sociedad que se dedicó a lucrar a expensas del país, pero no a invertir en el mismo, una sociedad que miraba hacia afuera antes que hacia adentro. Ciertamente, hay una apelación de esta "clase dominante" -bien entre comillas- al amparo del mesías extranjero, una esperanza de que las potencias europeas resolverían el conflicto por ellos. Y, en fin, no estuvimos solos, la gente tal vez no lo recuerda, pero, al margen de que Inglaterra equipó, blindó y reforzó la armada chilena, el imperio alemán, en esa época principal enemiga inglesa, hizo lo propio, nos brindó un nada desdeñable aporte bélico. Desde aquí podemos decir que, ciertamente, la guerra del pacífico fue una guerra internacional imperialista.
El paralelismo con nuestros días, aquí, es evidente: se mantiene todavía esa actitud copista, mediocre, esa actitud de calcar modelos del exterior para aplicarlos aquí como vengan, sin tener en cuenta las particularidades de nuestra idiosincrasia, esa dependencia atroz de sistemas políticos, económicos, sociales y hasta culturales ajenos y extraños, que no reflejan nuestra realidad nacional. Y aquí podemos mencionar la idea de la identidad nacional. No se da esta porque no hay un correlato entre la mentalidad de la clase dirigente y los problemas macro. Los dirigentes, centralistas, todavía, son incapaces de variar perspectivas, la política del palais concert.

2. El acto de ilusa confianza en la alianza peruano-boliviana de mutua cooperación. Nadie aduce que haber llevado a cabo un pacto con el hermano y vecino país boliviano sea un error. Lo que sí se cuestiona es la actitud, la coherencia. La alianza, empolvada, hacía mucho tiempo que no se trataba en los debates congresales, no hubo el más mínimo seguimiento a los problemas chileno-bolivianos -por poner un ejemplo, la crisis de los 10 centavos, desencadenante de la guerra-, los mecanismos de la susodicha alianza no eran claros. Con todo esto, ¿no pecó de precoz la decisión de las autoridades de entrar en guerra? ¿no pecó de impulsiva?

3. La doble cara del gobierno estadounidense y la conveniencia del fracaso de la intervención norteamericana. A pesar de que en esa época no era la primera potencia mundial, EEUU ya tenía ideales imperialistas. El embajador Cristianzi quería al Perú como un protectorado norteamericano - solo los problemas que se desencadenaron con la IPC ya eran alarmantes, lógicamente, se esperaría lo peor con una base militar estadounidense en nuestra tierra-. En cierta manera le convenía tener al Perú, situado en un lugar estratégico de américa del sur, como protectorado para poder manejar el subcontinente. Sin embargo, el tan solo hecho de incentivar el conflicto entre los países sudamericanos ya era un norte para los estadounidenses. Brasil amenazó entonces con unirse a Chile si es que Argentina hacía lo propio con Bolivia y Perú; por ende, los dos gigantes de sudamérica se mantuvieron al margen.

4. Las dos caras de la moneda: Clemente Palma, por un lado, representante exquisito de la clase dominante, excluyente y abusiva, intolerante, pre-fascista, si cabe el término, desestimó y condenó a las clases populares, y fue apoyado por toda una serie de escritores floreros, burdos y figurettis, quienes culparon al ande del fracaso, sin antes ponerse a pensar en el correlato geopolítico; y Andrés Avelino Cáceres, quien debe recordarse por su maestría, bravura e ingenio, puesto que el esfuerzo que realizó por contener las fuerzas chilenas fue encomiable.

Ahora bien, Parodi, quien fue el verdadero ponente ante el problema de Palomino Flores, desarrolló la idea de la "Mala Paz". El conflicto peruano-chileno se resolvió completamente en 1999, es decir, 70 años después de la reincorporación de Tacna al Perú. Esto nos da una idea de las carencias, retrasos y dificultades en nuestras relaciones internacionales. Recién a partir de 1999 se puede hablar de un integracionismo para con el escueto país del sur. Nos da qué pensar, ¿no?

El comentario de la mesa lo dejo para otro momento, tengo que estudiar para la exposición del trabajo de Desarrollo Humano II, y también me muero de sueño.

martes, octubre 25, 2005

Untitled 2

Y regresé al colegio por unos minutos. No, no fue una agradable visita, como la de un familiar cercano que no se ve hace tiempo y se le invita a tomar el té dado que está de paso por la ciudad. No. No hubieron abrazos, mas sí mucho estrés.

Alguno que otro profesor me divisó, me saludó y se sorprendió al verme. Alguna sonrisa de complicidad fue mi respuesta, una que otra mirada, un saludo y pocas palabras. El típico diálogo:

Sujeto-que-no-veo-hace-años: ¿cómo te va? ¿en qué andas ahora?
Chema: Bien, estudiando Psicología.
Sujeto-que-no-veo-hace-años: ewwww....*

El motivo de la visita fue la necesidad. Teníamos un trabajo -y de hecho lo tenemos, todavía, porque se entrega el jueves y nos falta bastante para terminar- de Desarrollo Humano II, sobre Adolescentes en Riesgo: Depresión y Suicidio, y necesitábamos llevar a cabo un determinado número de encuestas en distintos colegios particulares y públicos, con el objeto de comparar resultados de actitud hacia el suicidio y la depresión en diferentes NSE**. Ofrecí mi colegio de buena gana, y enrumbé presuroso, luego, claro está, de pasar por el burocrastismo papelero tedioso e impersonal***.

Me encontré entonces con María Eugenia y Judith, las psicólogas de secundaria, quienes me saludaron y felicitaron -oh, por fin- de ser sus colegas. Les comenté los pormenores del trabajo, a quiénes estaba dirigido - 2°, 4° y 5° de secundaria, hombres y mujeres-, entre otras cosas.

El viernes dejé 30 de las susodichas encuestas; el lunes, por una descoordinación de mi grupo de trabajo, me vi obligado no solo a levantarme antes de las 6 para imprimir y sacar copias, sino importunar a María Eugenia -ya habíamos quedado en 30 encuestas, solamente- y darle 30 encuestas más, para compaginar y estandarizar las muestras. Me sentí a morir por la conchudez. Pero claro, en esta parte del año el trabajo en el colegio es a full-time. Lógicamente, le fue imposible hacerme llegar las encuestas extras resueltas para el mismo lunes, estarán para hoy a las 2pm. Ahora me encuentro revisando y corrigiendo el marco teórico del trabajo, son las 5:26am y tengo harta chamba, todavía. Hoy tenemos una entrevista con el especialista en Suicidio en el Perú, sr. Freddy Vásquez, al que ya contactamos. Será una travesía larga hasta Noguchi. Será una empresa complicada el completar el marco teórico. Serán duras jornadas hasta el Jueves de la exposición, pero ahí estamos.

Esta historia no termina con un final feliz -no lo sabemos, aunque lo esperamos todos, como es obvio-, es más, no ha hecho más que empezar. Vuelvo a mis asuntos, hasta la próxima.

Notas:
* Esta es la expresión de signo de interrogación que todavía aparece en las caras de los que pensaban que estudiaría derecho.
** NSE: Nivel Socio-Económico.
*** Para los trabajos con otras entidades -llámese colegios, empresas o instituciones estatales- la universidad nos exige manejarnos con cartas, cargos, sellos y permisos.

sábado, octubre 22, 2005

Untitled


Quizás un poco para desestrezarme por la seguidilla de trabajos pendientes, las encuestas, las visitas y las entrevistas, me sumergí en mi cuarto con una antigua y casi olvidada distracción, un casi olvidado pasatiempo, hacer canciones.



Aquí están mi guitarra, mi grabadora, mi órgano, las letras y uno de mis cuadernos de música, todos sobre mi escritorio, donde me senté a grabar -pocas veces leo ahí, a excepción de los exámenes, siempre leo en otros lugares-.



Ya grabé una canción; sin embargo, la tengo que reeditar un par de veces, hasta mejorarla lo suficiente para que esté a un nivel aceptable.

Un dato curioso, consciente o inconscientemente... la pelada... ¿tendrá algo que ver con hacer canciones? parece que en mi caso sí, puesto que hubo una sequía bastante considerable, desde el 2003 que no hacía ninguna.

Sí, pues, Untitled, porque la canción todavía no tiene título, aunque de hecho ya hay melodía de estrofas y coro (primera guitarra) , letras de estrofas y coro, y acompañamiento para piano, percusión y segunda guitarra, solo que a falta de gente, hago la versión sencilla nomás :$.

miércoles, octubre 19, 2005

4 años


Después de 4 años...

más grasa,
más granos,
más arrugas,


ah... más conocimientos...

lunes, octubre 17, 2005

Sonrisa

Una sonrisa para todos los momentos.
Una sonrisa para todos los eventos.
Para la alegría: sonrisas de constatación, de diversión, de comunión...
Para la tristeza: sonrisas de entereza, de resurgimiento, de reposición...
Para la esperanza: sonrisas de premonición, de fe, de convicción...




Una sonrisa y nada más.


Ni tan quiméricas...

Jejeje...

pues, tengo que agradecer a mi buena amiga blogger Diana, quien rápidamente me dio lecciones sobre como utilizar los templates para llevar a cabo las actualizaciones que estimé convenientes.

Estas actualizaciones son:
- El Animal Extraordinario del Mes (ver abajo a la derecha)
- El Destino Turístico del Mes (ver abajo a la derecha)

En cuanto a Dianita, pues no me queda más que darle las gracias, e invitar a la comunidad
bloggera a que la visiten [http://morenaescribe.blogspot.com], aunque ella es toda una institución ya, y no necesita de una presentación. Igual, se agradece tu ayuda... :D

domingo, octubre 16, 2005

Actualizaciones Quiméricas

Pucha, qué feo es no saber nada de templates y cosas de esas.

Tengo la intención, por un lado, de tener una canción de fondo para la página, siquiera midi si es que no se puede, pero la verdad que lo he intentado varias veces y naranjas.

Ahora tengo la intención de poner, en el espacio del costado, fotos de animales asombrosos, y pequeños datos, curiosidades sobre los mismos, que iría compartiendo con ustedes poco a poco. Una de mis pasiones es la zoología. Sin embargo, nuevamente parece que estoy tirando la toalla, no puedo con los textos html y demás, muy complicados.

Pero como no me quiero quedar en nada, igual iré esbozando este proyecto en post venideros. Así que, para los fans de los animales, la promesa ya está hecha: escribiré por lo menos una vez a la semana un post con contenidos referentes a animales asombrosos.

Si la información no es suficiente, pues les recomiendo estos dos libros, que me ilustraron, desde pequeño, el gusto por el tema.





A la izquierda tenemos el libro Curiosidades de los Animales
(Madrid: Susaeta, 1992), un interesante texto, aunque bueno, el lenguaje es muy simple, es un libro didáctico para niños.






A la derecha tenemos el libro Enciclopedia del Reino Animal (Madrid: Susaeta, 1992), que en suma, es una completísima enciclopedia, en un solo tomo, detallada con mapas, ilustraciones y fotos a todo color, que primero nos ilustra los distintos ecosistemas de nuestro planeta, en los que viven mucho más de un millón de especies.





En la naturaleza existen 5 reinos: monera (procariontes)*, protista (eucariontes)**, plantae (plantas), fungis (hongos), y animalea (reino animal).


La enciclopedia clasifica al reino animal, centrándose en los cordados (phylium Cordatha), que incluye a los tunicados***, leptocardios****, peces óseos y cartilaginosos, anfibios, reptiles, aves y mamíferos, pero también nos muestra los otros : Protozoos (phylium Protozoa), Celentéreos (phylium Coelenterata), Moluscos (phylium Mollusca), Gusanos Segmentados (phylium Annelida), Onicóforos (phylium Onychophora), Artrópodos (phylium Arthropoda)*****, Equinodermos (phylium Echinodermata), Briozoos (phylium Ectoprocta), Quetognatos o Gusanos Flecha (phylium Chaetognatha), y los Balanoglossus o Gusanos Bellota (phylium Hemichordata).

Este último libro es mi biblia. Se los recomiendo, de todo corazón, si están interesados en el tema.

Nota preliminar:
Les debe parecer raro que peces, anfibios, reptiles, aves y mamíferos pertenezcan todos a un grupo denominado Cordados, pero así es. Aquí, es menester aclarar que no todos los cordados son vertebrados, sino que los vertebrados son un sub-grupo que se desprende de los mismos. Los cordados que tienen espina dorsal son los vertebrados, los otros, y aquí nos referimos a los tunicados y a los leptocardios, tienen una notocorda (primitivo conducto nervioso en la región dorsal), así como hendiduras faríngeas (branquias), propias de los cordados superiores (peces) .

Notas:
* procariontes: organismos unicelulares vivos, cuya única célula carece de núcleo.
** eucariontes: organismos unicelulares vivos, cuya única célula es nucleada. De éstos, se derivan los otros tres reinos, como se ve en la imagen: hongos, plantas y animales.
*** tunicados: Con 1200 especies, los tunicados conforman el primer grupo -desde la perspectiva evolucionista- del phylium cordados, el sub-phylium Urochordata. Son animales de una silueta similar a la de un tonel, cuya única semejanza con los demás cordados se da en su período larvario. La característica principal de los tunicados es que se adhieren, en el período adulto, a la superficie rocosa marina, y se fijan en ella. No son segmentados.
**** leptocardios: Existen alrededor de 20 especies de este sub-filum de cordados, denominado sub-phylium Cephalochordata. Son animales segmentados que viven cerca a la orilla, mas no tienen extremidades, aletas, mandíbulas, huesos. Lo único que los identifica con los cordados es una notocorda y una cuerda dorsal, situadas en la cabeza (etimología del nombre). Son sexuados. De aquí vienen los vertebrados más desarrollados, es decir, por el lado de los leptocardios, fue que la evolución siguió hacia los vertebrados.
***** artrópodos: Para los que leyeron moluscos como phylium y no vieron crustáceos, arácnidos ni insectos, es porque este es su grupo. El phylium artrópodos, sin duda alguna, es el que tiene más vástagos alrededor de la tierra -los insectos, solamente, son más que todos los otros distintos animales juntos-. En él se incluyen los trilobites, animales ya extintos; arácnidos (o sea arañas, tarántulas y escorpiones); ciempiés (clase chilopoda) y miriápodos - o milpiés- (clase diplopoda); crustáceos e insectos. La característica principal de estos animales, sin duda alguna, es su estructura corporal, similar a una armadura, muy fuerte y resistente por fuera, pero blanda al interior. La diferencia entre estos y sus superiores - a nuestro juicio, los vertebrados-, es que desarrollaron su esqueleto de afuera hacia dentro, protegiéndose con corazas, mientras que los vertebrados lo hicieron de adentro hacia afuera, desarrollando un esqueleto óseo que les permitió crecer a placer.

Me despido, no sin antes recomendarles, nuevamente, que adquieran estos dos libros.

miércoles, octubre 12, 2005

My Favorite Things

Abro un nuevo paréntesis.

Son las 3:51am, acabo de hacer una pausa en mi repaso previo al examen parcial de Motivación, examen que comenzará a las 11am. Repasaba un poco el tema de la activación, la sub-activación y la sobre-activación [ Ver Reeve, M. (1995) Motivation and Emotion. Cap. 3: Arousal. Madrid: McGraw-Hill].

De pronto se me cruzaron por la cabeza la tonada, la letra y la melodía de Rodgers & Hammerstein, la alegría de la siempre tan encantadora Julie Andrews, y el gran elenco de niños que junto con ella protagonizaron una de las más tiernas y memorables películas que se recuerden: The Sound of Music. Es menester aclarar que soy un empedernido fanático de esta colosal película, la he visto decenas de veces -y siempre se me escapan las lágrimas-, me he bajado el soundtrack completo y hasta he sido apodado Kurt- para los que no se acuerdan, sí, el gordito, el segundo hijo varón del capitán Von Trapp, el cuarto de los siete hijos- en más de una ocasión.

En esta ocasión recordé la magistral letra de My Favorite Things. La anexo a este post, porque sencillamente ya tiré la toalla con eso de colocar un texto apéndice al costado derecho del blog - el margen me persigue, es tan limitante como no poder usar tildes en el Hi5-. Comparto pues, con ustedes, la letra de esta gran canción, y vuelvo a sumergirme en el estudio, con la plena convicción de que me mantengo más despierto y activado por el estímulo de esta canción, que por las cuchucientas tazas de café que he consumido desde que empecé a estudiar.

Niños. Uno de los instantes más tiernos y entrañables de la película, en la que María canta dulcemente con los niños para calmarlos por la tormenta.

My Favorite Things

Raindrops on roses and whiskers on kittens,
Bright copper kettles and warm woolen mittens,
Brown paper packages tied up with strings,
These are a few of my favorite things.

Cream-colored ponies and crisp apple struddles,
Doorbells and sleigh bells and schnitzel with noodles,
Wild geese that fly with the moon on their wings,
These are a few of my favorite things.

When the
dog bites,
When the
bee stings,
When I'm feeling
sad...
I simply remember my favorite things
And then I don't feel... so bad.


Vuelvo a cerrar paréntesis.

martes, octubre 11, 2005

Paréntesis

Ahhh... el amor... ¿no es acaso el tema más recurrente en la literatura, en la música, en la vida misma? ¿No es un tema que se toca y se trastoca, unas veces pesadamente, otras trivial, superficial o estúpidamente? Desde monosilábicos entes hasta los grandes pensadores, desde filósofos duchos, filólogos, hombres de la pluma, la lira o la voz, hasta amas de casa que no pueden dejar de prender la televisión para ver la telenovela de moda: el ser humano, al menos en occidente, se ha pasado cientos de años escribiendo sobre el tema, reflexionando, divagando.


No, no se diga nada, absolutamente nada. Sólo obsérvese la imagen: ¿qué ven allí? ¿No es acaso el amor mismo? No es acaso la ternura, el cariño, todo en la vida reflejada en una sencilla pero tan impactante, simple pero tan conmovedora imagen?

- suspiro -

Cierro paréntesis.

Etiquetas y formalismos

Como una especie de brevísimo preludio, comparto esta dirección, una página dedicada a esa onda meego, solo que de los creadores de la genial serie de dibujos pseudoanimados (si la han visto entenderán) SouthPark. El link es el siguiente: http://www.spstudio.elena.hosting-friends.de/spstudio.html

Chema Southpark. Sí, sí, este soy yo en un dibujo a lo southpark.

... Pues sí, este blog se está haciendo pesado, poco ágil, y en efecto, la lectura también entra por cómo se ha escrito, no todo es el qué. Acabaré por reconocer esto y variar un poco el estilo de los posts. Por lo demás nada, o muy poco.

Veremos qué más se puede hacer.

lunes, octubre 10, 2005

Parciales: madrugada primera

Quién lo diría, después de un prolongado receso vengo a manifestarme en la madrugada previa a mi primer examen parcial de segundo ciclo. No se alarmen, todo bajo control, el balotario ya fue resuelto, aunque he tenido ciertas dificultades para mantener la concentración. Es interesante como el estado de ánimo incurre y condiciona predisposiciones, pensamientos y acciones. Y sí, no faltaron los amigos que me estrellaron la sartén en la cara y dijeron "¡Despierta, el examen es el lunes... faltan dos días... es mañana...", o aquellos otros, más críticos y directos, que no mezcle los ámbitos privado y académico. En parte tienen razón, y en parte están equivocados, éstos están también entrelazados, por diversos factores.

Abatido, psicoseado y abrumado por estos conflictos internos, es cierto, una vez más dejé para el final todos los pendientes. Pero traigo por fin novedades, aleluya, hosana, por fin. Reorganicé mi dormitorio, todos los documentos de todos los ciclos están correctamente colocados en files, uno para cada semestre en la universidad. Oh sí, cuando uno tiene sobrecargada la mente por problemas emocionales, personales, le es más fácil dedicarse a algo mecánico, manual, como ordenar documentos que a ponerse a definir, conjeturar, idealizar e hipotetizar (podría decir estudiar, claro, pero no, eso suena a paporreteo escolar anacrónico, desfasado), aunque el sólo hecho de hacer esto ya es algo significativo. Bueno, al menos para mí.

En la mañana del domingo; y dicho sea de paso, hoy lunes a las 4pm es el primer examen parcial de la facultad; había ya terminado de ordenar completamente todo el dormitorio, incluyendo la pequeñísima biblioteca de consulta, el escritorio, las vetustas y empolvadas repisas de libros y cuadernos varios, en fin. Tuve que esperar, como quién dice, el golpe del destino, anímico, motivador, el móvil que me llamaría a empezar a leer, señalar un poco el tao y apartarme, aunque sea por un instante del ambiente privado y centrarme en el académico. Y este golpe vino subliminal, mientras bajaba las diapositivas de clase y las imprimía, del televisor de mi madre... Pérez Albela en su programa Bien de Salud, pasando un vídeo de un guitarrista manco, que tocaba con los pies, y que fue condecorado por el mismísimo Juan Pablo II. En otros momentos, tranquilamente, me hubiera puesto a cuestionar al mismísimo representante de Pedro en la tierra, o bien centrarme en la falta de resolución del vídeo mismo, que de lejos era del año de la pera, o en la traducción (el cantante era brasileño, y aquí pude haber recordado los comerciales de madrugada de Pare de Sufrir y esas pelotudeces). Pero no, esta vez recibí una cachetada, una amonestación de mí mismo. Agaché la cabeza y mis mejillas se ruborizaron, confesé mi debilidad y traté de reponerme. Albela mencionó a la música, particularmente a la canción Ave Maria, una ópera muy difundida por este y otros lares. Lejos de extrañarme y criticar lo que este gurú de la medicina naturista dijo de la misma, al tildarla de una canción celestial, que hubiera sido lo usual en mí, la recordé en la época en que solía cantarla en el coro de mi colegio. Súbitamente, sentí una pequeña ráfaga de energía y casi sin esperar a la pobre impresora que finalice los documentos pendientes, me encerré en mi cuarto y empecé a leer. Debo reconocer que todo no fue color de rosa, de hecho, fue recién a las 8pm que el recuerdo hizo efecto y empecé a resolver tibia pero progresivamente el balotario de 38 preguntas. Sin embargo, y como siempre, agradezco a esas pequeñas casualidades que impulsan a uno a hacer, rehacer y deshacer.