El año pasado, por el cumpleaños de mi hermano, mi mamá quiso viajar a Buenos Aires, y yo no pude ir porque me encontraba en exámenes parciales. En ese entonces, por rabia y por un gusto especial por el tango, me bajé alrededor de 150 canciones de Gardel. Ahora, como solo llevo dos cursos, a pesar de que también tengo muy cerca dichos parciales, viajé con mi familia a México. Fuimos una semana a Cancún, el popular y paradisíaco punto mexicano, y dos días en la Ciudad de México, el famoso DF o Distrito Federal. Aquí un poco del viaje.
Imponente. Chichen Itzá se eleva hacia el cielo con maravillosa precisión.
México es un país muy parecido al Perú en su composición, en su cultura y en su gente. Los mexicanos son cálidos, alegres, llevaderos. Confiables, tienen buen sentido del humor y son atentos, respetuosos y educados.
Es cierto que el DF es la ciudad con más secuestros, asesinatos y robos en toda América, pero también es cierto que hay más de 28 millones de personas que la conforman, y como todos los que dominamos algo de teorías de masas, mientras más gente hay, más belicoso se vuelve el asunto. Aún así, México DF es una ciudad ordenada: los negocios están separados por calles, de manera que aquella es la calle de los artículos de cocina, y la otra es la calle de los artículos de baño. Hasta las putas están ordenadas en una calle de la más barata a la más cara.
Por su parte, Cancún es el paraíso en la tierra. Las arenas blancas son bañadas por aguas cristalinas, esmeraldo-zafirinas. Los hoteles más lujosos del mundo. Ni un ápice de suciedad ni de basura, y mucha modernidad. Y lo más importante, la bandera más grande y orgullosa del mundo, en un soñado mástil que parece un secuoya. Ya quisiera yo que en el Perú exista gente que quiera tanto a su patria.
Cancún: Belleza y modernidad. Se observan los hoteles imitando las antiguas construcciones mayas, circundados por exhuberante tropicalidad.
Las similitudes entre las dos grandes culturas mexicanas, los mayas y los mexicas o aztecas, y los incas son muchas y muy fuertes. Si bien los incas desarrollaron obras maestras de ingeniería hidráulica y el trabajo en metales, los mayas y los aztecas perfeccionaron el trabajo en piedra y desarrollaron la escritura. Y aunque Chichen Itza no puede compararse a Macchu Picchu -puesto que Macchu Picchu no solo es una estructura de concreto, sino la mixtura perfecta entre la hechumbre humana y la naturaleza, verdaderamente una maravilla, por lo que despierta en quien la vea; más de 270° de vista esplendorosa-, es un gigante que llama la atención por la destreza, pulcritud y exactitud matemática de sus inventores. Los mayas fueron realmente una civilización, lo mismo que los aztecas -pese a que se acepta que el gran número de sacrificios humanos de éstos últimos eran, en realidad, motivo de prácticas antropófagas-, crearon su propio deporte, el Pok Ta Pok, un juego de pelota muy parecido al fútbol, con la diferencia de que eran dos equipos de 10, que en lugar de dominar el balón con el pie se hace con los muslos, y que los puntos de gol eran en realidad aros en lo alto de edificaciones especiales para este tipo de juegos.
Así y todo, México es verdaderamente lindo. Se los recomiendo.
Así y todo, México es verdaderamente lindo. Se los recomiendo.
1 comentario:
mexico es buenazo!
yo estuve en playa del carmen hace un año, es genial, las playas, el calorcito, es buenazo la verdad
d i a n a
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